El expresidente Donald Trump visitará Eagle Pass y también el presidente Joseph Biden viajará a Brownsville, Texas, en Rio Grande Valley el jueves 29 de febrero. En los dos mil kilómetros de la frontera de Texas con México se registran cerca del 55 por ciento del total de las detenciones en la frontera sur estadounidense. La inmigración ha desplazado a la economía como el tema central de la confrontación política a ocho meses de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
El expresidente Trump, ya hizo de la inmigración el eje de su campaña en las elecciones de 2016, visita la frontera de Eagle Pass, en donde se manifiesta una disputa entre el Gobierno federal y el estado de Texas por el control de la inmigración, con implicaciones constitucionales.
En cambio el presidente Biden se reunirá con agentes fronterizos y abordará la importancia de una ley bipartidista. Es la segunda visita del presidente Biden a la frontera, luego de viajar a El Paso, el año pasado. Las visitas de ambos candidatos refleja el papel central de la inmigración. Se estima en cerca de 7 millones y medio de detenciones en los tres años del actual gobierno estadounidense (USCBP, 13 febrero 2024). Las detenciones por cruces irregulares se redujeron a la mitad en enero (124, 220), pero en diciembre (249, 735) se registraron máximos históricos (USCBP, 13 febrero 2024).
El presidente Biden ha criticado a los republicanos por rechazar el acuerdo fronterizo bipartidista después de que el expresidente Trump se opusiera al plan de endurecer las restricciones al asilo y establecer límites diarios a los cruces fronterizos. La propuesta presidencial incluía ayuda a Ucrania y a Israel, y reformas para frenar la inmigración ilegal en la frontera con México (aumentar el número de agentes de la Patrulla Fronteriza, más funcionarios para gestión de la política de asilo y tecnología de detección de fentanilo).
El presidente Biden propondría un decreto para impedir a los inmigrantes irregulares solicitar el asilo tras su llegada a Estados Unidos. La orden ejecutiva, modificaría una de las tradiciones más arraigadas, la posibilidad de que los migrantes que emigran tengan protección al llegar a territorio estadounidense. El plan es similar al planteado por Donald Trump durante su mandato.
El gobierno de Estados Unidos ha propuesto una política de restricciones en la frontera y además con un incremento en las vías legales (reunificación familiar, visas humanitarias y laborales, Estatus de Protección Temporal) para recibir a los migrantes, que arriben en avión y con patrocinadores, no a pie y de manera ilegal a la frontera; sin embargo, la política actual permite que los inmigrantes soliciten asilo independientemente de su forma de llegada.
Según una encuesta de AP-NORC de enero 2024, las preocupaciones sobre la inmigración entre los habitantes de Estados Unidos aumentaron a 35 por ciento, en comparación con 27 por ciento el año pasado. La mayoría de los republicanos —55 por ciento— dijo que el gobierno debe centrarse en restringir la inmigración en 2024, mientras que 22 por ciento de los demócratas consideraron que la inmigración es una prioridad (El Financiero, 26 febrero 2024).
En la última encuesta de Gallup publicada este martes 28 febrero, el sondeo realizado del 1 al 20 de febrero encontró que el 28 % de los estadounidenses mencionaron a la inmigración como el principal problema del país, lo que representa un aumento de 8 puntos con respecto a enero pasado, cuando el 20 % de los encuestados creía que era el asunto más relevante. Cabe destacar que la inmigración no figuraba como el tema principal entre los estadounidenses desde julio de 2019 en la encuesta mensual realizada por Gallup (Redacción AN / ES, 27 Febrero 2024).
En el contexto del aumento de la movilidad humana el secretario de Estado Antony J. Blinken fue el anfitrión de una Reunión Ministerial Trilateral sobre Migración con Guatemala y México este 28 de febrero en Washington, D.C. El secretario de Estado Blinken propuso una vez más un diálogo para fortalecer la gestión humana de la migración, la colaboración conjunta para abordar las causas fundamentales de migración y desplazamiento irregular, y formas de ampliar las vías legales en el Hemisferio Occidental. (Departamento de Estado de los Estados Unidos, 27 febrero 2024).
La cuestión central es si los países generadores de la mayor emigración hacia los Estados Unidos y el gobierno estadounidense tienen la voluntad política e institucional de promover una eficaz corresponsabilidad regional de atender las causas de la emigración, con base de políticas de desarrollo local, integración de las remesas internacionales y mayores recursos -20 mil millones de dólares- del gobierno estadounidense con mecanismos de transparencia y rendición de cuentas.