/ miércoles 16 de octubre de 2024

Expediente Confidencial / Tómbola y arrepentimiento tardío

El día que las y los senadores morenistas hicieron el sorteo para determinar qué jueces someterán su cargo a votación en la primera elección judicial, que se llevará a cabo en 2025, una jueza, Ángeles Tovar, rompía en llanto y decía que le estaban destruyendo lo que se ganó, según ella, con todo su esfuerzo.

Suponiendo que así haya sido, la citada togada olvida que el haber llegado a su cargo no le concedió un derecho vitalicio para ejercerlo, pese a que muchos jueces así lo creían, ni tampoco un salvoconducto para salir indemne e impune de la comisión de excesos.

¿Cuántas veces esos jueces que hoy bufan de coraje o lloran de frustración, se portaron a la altura de su encomienda? ¿Cuántas veces prefirieron el dinero fácil, otorgando amparos o sentencias al mejor postor, mientras la gente de a pie, que no tenía dinero para pagar ese tipo de prebendas, solamente recibía injusticias, bufando de coraje o llorando igual que hoy lo hacen ellos?

¿Cuántas veces no fueron las víctimas quienes lloraron por las decisiones vendidas e injustas de esos jueces? Y esas víctimas no van a tener una jugosa liquidación, como la que esos jueces si tendrán, ni tampoco podrán vivir una existencia lujosa que esos jueces si vivirán, con todo el dinero bien o mal habido que se llevaron en todos estos años.

Así que esos jueces no son víctimas, simplemente pagan las consecuencias de sus actos durante tantos y tantos años.

Y pagan también las consecuencias de su cinismo, de pensar que siempre harían y desharían sin problema, de sentirse dioses contra los que jamás nadie podría. Pero he ahí que un día cambiaron quienes tenían el poder y ellos, en esa idea falsa de omnipotencia, creyeron que podrían arrodillar a ese nuevo gobierno y a quienes votaron por este. Y pues se equivocaron. Apostaron al caballo equivocado. Y eso, en política, mata.

En ese espejo deben verse también quienes hoy, desde el poder morenista, sienten lo mismo. Aún y cuando Morena dure 30 años o más gobernando, cambiarán los grupos y quienes detentan y ostentan el poder. Y nunca es bueno dinamitar puentes con la sociedad desde los excesos, so pena de que mañana, al ser reses llevadas al matadero, nadie los defienda

P.D.: Es fascinante, aunque no sorprendente, como la comentocracia pinta al actual Poder Judicial Federal como un ente puro y sin mácula. De risa más loca es que digan que, con la Reforma Judicial, criminales y empresarios van a tener jueces a modo ¡Como si las sentencias y amparos para liberar criminales o beneficiar empresarios no existieran en México!

Ese es el problema cuando solamente ves un lado de la realidad. Crees que todo era perfecto, simplemente porque el beneficiado eras tú

Comentarios: gerardofm2020@gmail.com

El día que las y los senadores morenistas hicieron el sorteo para determinar qué jueces someterán su cargo a votación en la primera elección judicial, que se llevará a cabo en 2025, una jueza, Ángeles Tovar, rompía en llanto y decía que le estaban destruyendo lo que se ganó, según ella, con todo su esfuerzo.

Suponiendo que así haya sido, la citada togada olvida que el haber llegado a su cargo no le concedió un derecho vitalicio para ejercerlo, pese a que muchos jueces así lo creían, ni tampoco un salvoconducto para salir indemne e impune de la comisión de excesos.

¿Cuántas veces esos jueces que hoy bufan de coraje o lloran de frustración, se portaron a la altura de su encomienda? ¿Cuántas veces prefirieron el dinero fácil, otorgando amparos o sentencias al mejor postor, mientras la gente de a pie, que no tenía dinero para pagar ese tipo de prebendas, solamente recibía injusticias, bufando de coraje o llorando igual que hoy lo hacen ellos?

¿Cuántas veces no fueron las víctimas quienes lloraron por las decisiones vendidas e injustas de esos jueces? Y esas víctimas no van a tener una jugosa liquidación, como la que esos jueces si tendrán, ni tampoco podrán vivir una existencia lujosa que esos jueces si vivirán, con todo el dinero bien o mal habido que se llevaron en todos estos años.

Así que esos jueces no son víctimas, simplemente pagan las consecuencias de sus actos durante tantos y tantos años.

Y pagan también las consecuencias de su cinismo, de pensar que siempre harían y desharían sin problema, de sentirse dioses contra los que jamás nadie podría. Pero he ahí que un día cambiaron quienes tenían el poder y ellos, en esa idea falsa de omnipotencia, creyeron que podrían arrodillar a ese nuevo gobierno y a quienes votaron por este. Y pues se equivocaron. Apostaron al caballo equivocado. Y eso, en política, mata.

En ese espejo deben verse también quienes hoy, desde el poder morenista, sienten lo mismo. Aún y cuando Morena dure 30 años o más gobernando, cambiarán los grupos y quienes detentan y ostentan el poder. Y nunca es bueno dinamitar puentes con la sociedad desde los excesos, so pena de que mañana, al ser reses llevadas al matadero, nadie los defienda

P.D.: Es fascinante, aunque no sorprendente, como la comentocracia pinta al actual Poder Judicial Federal como un ente puro y sin mácula. De risa más loca es que digan que, con la Reforma Judicial, criminales y empresarios van a tener jueces a modo ¡Como si las sentencias y amparos para liberar criminales o beneficiar empresarios no existieran en México!

Ese es el problema cuando solamente ves un lado de la realidad. Crees que todo era perfecto, simplemente porque el beneficiado eras tú

Comentarios: gerardofm2020@gmail.com