El mundo del interiorismo mexicano ha tenido una gran evolución a través del tiempo, ya que contamos con mentes creativas y profesionales, que le han dado un giro total con la implementación de nuevas tendencias y técnicas.
Y cuando estos genios creativos se unen, el resultado puede ser único y espectacular, como sucedió en Casa Palacio, donde se realizó la presentación de la colaboración de la icónica casa Richard Ginori 1735, famosa por su exquisita producción de porcelana, y Gucci, uno de los referentes modernos de diseño, estilo, y lujo.
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Para este evento, se contó con la presencia de destacados personajes del diseño como Elena Talavera, Sofía Aspe, Lorena Vieyra y dos jóvenes promesas, Andrés Gutiérrez y Mariano Aguirre, quienes eligieron una de las vajillas para montar una mesa, decorar el espacio, y llevar el lujo y su sello personal al espacio más importante del hogar, el comedor.
ELENA TALAVERA
Con más de 25 años de trayectoria, ha realizado propuestas que abarcan desde conceptos residenciales, restaurantes, hasta hoteles, oficinas y grandes corporativos y esta ocasión para montar esta mesa, eligió como protagonista a la vajilla Vecchio Ginori, un diseño sublime hecho de porcelana en blanco puro, inspirándose en los sentidos, cuando estos se fusionan en una sola experiencia.
“Yo pienso que, si tomas en cuenta todos los espacios de tu casa, los decoras bonito, les das mantenimiento, haces felices a todos los que viven ahí. Esa es la ardua labor de las amas de casa, yo he aprendido mucho de ellas, porque me conecto con ellas”, dijo Talavera a El Sol de México.
Mencionó que cada 7 años es el tiempo ideal para hacer cambios en el diseño de la casa, oficina y hasta en la vida personal, “yo pienso que cada 7 años hay que cambiar, es una cuestión energética, cada 7 años una persona sufre cambios, entonces retomar los espacios de tu casa en ese tiempo, es importante”.
Elena cree que el sentarte en una mesa bonita, ya sea propia o como invitado te sientes bienvenido, “cambia tu estado de ánimo, cuando tu anfitrión te recibe así, te sientes importante, así somos los mexicanos, nos gusta ser anfitriones, tener invitados”, concluyó.
SOFÍA ASPE
Otra reconocida interiorista, se inclinó por el estilo informal y muy veraniego, eligió para esta mesa la vajilla Babele, un clásico que retoma el espíritu de las artes decorativas del siglo XVIII, pero ahora viene renovado.
“Lo que me encantó de esta vajilla es que casi todos los platos son diferentes entre sí, entonces hay un tema artístico, y también cierto toque de informalidad, para inspirar a las personas de que no todas las vajillas en una mesa tienen que ser iguales, que se atrevan a romper reglas, utilizar cubiertos diferentes, copas, servilletas; de esta manera generas creatividad, y se refleja más la personalidad del anfitrión”, comentó.
También explicó que la mesa es la pieza de inmobiliario que más reúne a las personas, “más que una sala, o un cuarto, la mesa es la pieza que forma parte de las reuniones más importantes, en la mesa pasan los mejores momentos, un cumpleaños, la cena de navidad, los amigos y familia conviven”.
LORENA VIEYRA
La arquitecta con 20 años de experiencia se inspiró en la costumbre de tomar té, una experiencia cultural ya auténtica que puede desarrollarse en cualquier lugar, este caso, el contexto es una sala, el espacio central de un hogar donde se reúnen familiares y amigos.
La vajilla protagonista es Catane, que rinde homenaje al modernismo geométrico, movimiento en boga del siglo XVIII y que habla a través de estas piezas, donde la hora de la cena puede ser todo un acontecimiento cuando todos los elementos están perfectamente unidos.
“Tomar el té es una costumbre milenaria, es un ritual donde se intercambian pensamientos, ideas, filosofías, anécdotas, etc.,y lo mejor es que es con nuestros seres queridos”, dijo.
MARIANO AGUIRRE
Este joven talento, se inspiró en una noche de verano donde la familia se reúne para celebrar un cumpleaños, donde la vajilla de Oriente Italiano, con sus colores pastel y elementos alegres, serán testigo del importante acontecimiento.
“La mesa esta puesta para compartir historias, viajar juntos por los recuerdos y crear un momento inolvidable”, comentó.
Explicó que el diseño hace que la gente se desconecte de su alrededor y tras pase a otra dimensión donde se relaja y se la pasa cool, “poner una mesa con la iluminación correcta, los elementos y colores ideales, hace que los comensales se sientan más cómodos, a gusto y entonces se pueden desarrollar esas eternas pláticas a la hora de la comida o cena”.
ANDRÉS GUTIÉRREZ
Otra de las jóvenes propuestas dentro de la industria, se dejó llevar por la esencia de la antigua Roma, y juntó con la colección Laberinto romano, creo una mesa ecléctica, con elementos típicos de la época, combinados con detalles contemporáneos que logran un equilibrio entre sí, ideales para una cena o comida informal con amigos.
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Para Gutiérrez, el interiorismo es una cuestión de sensibilidad “es mi forma de expresarme y de ofrecerle amor y cosas bonitas al mundo, es como poder dejar un legado, poder hacer espacios lindos para los humanos. Me encanta encontrar ese balance entre la función y la estética y disfruto mucho poder manejar las emociones de las personas con los espacios”.
Con este montaje el interiorista quiso romper con los clichés de la elegancia y los modales “es una vajilla elegante y fina y precisamente quise romper con eso y volverlo más casual. Yo me imagino en esta mesa cenando con mis amigos”.
