Los vinos espumosos son la bebida para celebración por excelencia. En todos los grandes eventos, bodas, aniversarios, cierre de negocios, presentaciones, lanzamientos, en todos, nunca falta una copa de este tipo de vino. Unos prefieren los franceses, otros los californianos, aquí nos gustan los bajacalifornianos.
Pero en El Valle de Guadalupe la tendencia hacia esta variedad de vino ha ido en aumento de acuerdo con la sommelier y coordinadora de Wine Art School, Diana Villanueva.
“Veo esta tendencia no solo en el Valle de Guadalupe, sino en toda la región, pero obviamente, en el valle es donde se concentra la mayoría de las bodegas. Este boom tiene algunos años y cada día hay más interés, no solo el productor, sino también del consumidor por probar nuevas ofertas”.
Para la sommelier Villanueva la costumbre era beber algún estilo de vino más tradicional y muy poco el espumoso. Actualmente en el valle se trabaja con tres métodos de elaboración, por ejemplo el de tanque, que es el que se utiliza para la elaboración de Champbrulé.
“También se usa el tradicional, que es el mismo método que se utiliza en Champagne para hacer los vinos y que consiste en que haya una segunda fermentación en la botella para que ahí se formen estas burbujas. Y lo que está muy de moda es el interés en perfeccionar el método ancestral. En el coloquio general se les conoce como PET NAT que es una abreviación de pétillant naturel (espumoso natural) y en estos vinos se elabora la burbuja dentro de la botella”.
La experta explica que en el método ancestral se fermenta el vino en un tanque, pero antes de que concluya la fermentación es colocado en botella. Una vez que se tapa, ahí mismo termina de fermentar; por esa razón queda tan concentrado y ahí es cuando se forman las burbujas.
Destacó que hay unas 25 bodegas que trabajan de esta forma y que ya tienen en el mercado una variedad de estos vinos. Aunque aclaró que podrían ser más y que están en proceso de lanzarlos.
UN ROSARIO DE BURBUJAS
Ahora bien, los vinos espumosos de acuerdo con nuestra sommelier se disfrutan mejor cuando se sirven frescos, esto nos permite gozar más la presencia de la burbuja y las características aromáticas emanadas del vino.
“En un espumoso siempre vamos a ver las mismas fases, es decir la visual, el olfato y el gusto. La diferencia entre un vino tranquilo y un espumoso es que además vamos a observar la calidad de la burbuja, qué tan constante es. Todas estas burbujas que salen desde abajo hacia arriba de la copa flauta, se les conoce como rosarios y lo que se forma arriba es la corona”.
Agregó que una vez que se analizan los aromas en nariz, se degusta el vino y ahí también es posible evaluar la calidad de la burbuja, si es abundante o fina, enseguida vienen las características de sabor y entonces sí se determina la calidad del vino.
Precisó que hay seis métodos para hacer vino espumoso; el tradicional que es el de mayor reconocimiento, el de transferencia, de tanque, el continuo, el método ancestral, que se está poniendo cada vez más de moda y el de carbonatación o gasificación, que ese es cuando se le inyecta dióxido de carbono a un vino tranquilo para hacerlo espumoso.
“Puedes utilizar cualquier tipo de uva para hacer un espumoso, lo importante es lo que sucede en la viña, con la vid. Tiene que haber condiciones ideales en las uvas en la vendimia o cosecha, que tengan un grado de azúcar no muy elevado, sí un grado de acidez elevado, pero hay que cuidar muchísimo la maduración de los sabores en la fruta, el clima ideal es fresco para madure lentamente, se formen azúcares, pero no en exceso y se vayan desarrollando estas características aromáticas que acompañen tu vino espumoso”.
MARIDAJE
Un vino espumoso, nos explica Diana, se puede tomar en cualquier momento y son ideales para acompañar ciertos platos. Por ejemplo, como bienvenida, como aperitivo o con algo de entrada.
“Siempre vamos a tratar de buscar un vino seco, afrutado, algo que te ayude a abrir el paladar. A veces pensamos en ostras con espumoso, aunque debemos buscar que sea seco. Sin embargo, si tus platos ya traen un poquito más de complejidad a la hora de la elaboración, entonces a lo mejor podemos buscar los que son elaborados con el método tradicional, que es esta segunda fermentación en botella, el mismo método que se utiliza en la región de Champagne”.
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Diana asegura que hay un camino importante en los vinos espumosos de Baja California, sin demeritar claro que el espumoso por excelencia es el Champagne, mismo que tiene su denominación de origen en la región de Francia que le da el nombre a este singular vino.
