Tras una campaña que arrojó una marca global de 30 victorias y 16 derrotas y, como en todos los deportes, afectada por la pandemia del Covid-19, los Aztecs regresan al diamante con ánimos renovados para buscar trascender en 2022.
La campaña número 83 en la historia del programa inició este fin de semana con tres encuentros que acapararon la atención de los medios nacionales, al llevarse a cabo el Torneo MLB4 en Scottsdale, Arizona, con transmisiones a través del canal oficial de las Grandes Ligas en radio y televisión, MLB Network.
La casa de los Colorado Rockies y Arizona Diamondbacks en la primavera, Salt River Fields en Talking Stick, albergó los encuentros de este torneo que inauguró con la campaña de la pelota colegial en Estados Unidos.
Cabe mencionar que la atención para estos encuentros también fue resultado de la falta de acuerdo entre la Asociación de Jugadores y Las Mayores para que el profesionalismo regrese a sus actividades regulares, algo aprovechado por las universidades participantes.
El primer duelo de San Diego State presentó a un duro rival que antes estuvo en la misma conferencia, los Horned Frogs de Texas Christian; TCU, número 17 de la nación, obtuvo el triunfo 5 carreras a 3.
Sin embargo, SDSU pudo recuperarse en el segundo día de actividades al derrotar a los Cougars de Houston 4 carreras a 3, para culminar el fin de semana con una derrota 6 a 3 ante los California Golden Bears, quienes se llevaron el torneo de forma invicta.
El cuarto compromiso del año será en la Universidad de California Irvine este martes a las 18:00 horas.
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Luego de lograr una marca de 22 juegos ganados y 14 perdidos en juegos de conferencia, los Aztecs le dieron la bienvenida al bateador designado y lanzador zurdo Brian Leonhardt, al jugador de cuadro Caden Miller, al jugador multifuncional Cole Carrigg, al lanzador abridor Troy Melton y al derecho Ricky Tibbett.
SDSU fue la única escuela en la MWC en ganar 30 juegos en general en 2021, capturando victorias en series en 12 de 15 semanas durante la temporada regular. Los aztecas terminaron segundos en la lucha por el título de la conferencia detrás de Nevada y en 2022 buscan hacer ruido.