Una vez más, justo igual que el año pasado. La Selección Mexicana está contra las cuerdas y confirmó que en los últimos tiempos es una verdadera pesadilla visitar territorio hondureño. El Tricolor no existió en el estadio Morazán y La H necesitó sólo un par de goles para vencer al equipo del Vasco Aguirre, que ahora deberá remontar en Toluca para evitar el primer fracaso en su tercera gestión. La revancha catracha está cerca, a menos que los mexicanos digan lo contrario. 2-0 final.
La incógnita se despejó en el Tricolor en cuanto se supo que era Guillermo Ochoa el portero que sería titular en el partido ante los catrachos. Memo inició en el primer cotejo oficial del Vasco Aguirre y así inició todo.
Fueron malas noticias para el equipo de casa en cuanto su número ’10’, Alexander López, tuvo que salir en camilla después de una entrada de César Huerta. El Chino se llevó la rechifla, pero no fue amonestado. Sin embargo, a partir de ese momento, Honduras impuso más su condición, quiso ganarse el respeto de los mexicanos y tomó mayor iniciativa al ataque, con todo el público catracho a su favor en un hervidero multicolor.
México jamás creó peligro
El Tricolor apretó, pero no tuvo precisión ni conexión. Realmente fueron pocas las opciones claras que tuvo, tampoco Honduras inquietó demasiado a Memo Ochoa. Un disparo de Andy Najar, uno más de Joseph Rosales y otro de Edwin Rodríguez, como el más peligroso que detuvo el veterano arquero, fue de lo más relevante que tuvo que detener el guardián del AVS de Portugal.
Mientras que del otro lado, el catracho Edrick Menjívar tuvo también muy poco trabajo. Un disparo desviado de Raúl Jiménez sólo tuvo que verlo pasar y un remate de cabeza de César Montes fue lo único importante que pudo generar el equipo mexicano en San Pedro Sula. Jugadores como Chino Huerta, Orbelín Pineda y hasta Luis Quiñones pasaron desapercibidos en el Morazán.
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La Selección Mexicana se animó, pero Honduras pudo más
En el complemento parecía que todo se inclinaba para el lado mexicano. Por un lapso de tiempo se sintió que en cualquier momento podría caer el tanto de la visita, con oportunidades de Raúl Jiménez y Quiñones. Ambos jugadores militantes fuera de la Liga MX, uno en la Premier League y otro en la Liga Árabe, quisieron ser diferentes, pero ninguno pudo lograrlo y se quedaron con las ganas.
La selección catracha necesitó una oportunidad y abrió el marcador gracias a los errores mexicanos. César Montes no pudo despejar un balón de trámite, Rodríguez disparó y Ochoa detuvo, pero en el rebote, Luis Palma, recién ingresado, venció a Memo. El estadio Morazán explotó a grandes decibeles.
El combinado mexicano no pudo reaccionar y cerca del final recibió el segundo en su contra. Una vez más Luis Palma protagonizó la jugada y el delantero del Celtic de Escocia marcó su doblete que pone a sufrir al equipo de Aguirre.
Ahora la Selección Mexicana deberá remontar otra vez. Justo como hace un año, aunque ahora deberá hacerlo sin ningún tipo de polémica.
Publicado originalmente en ESTO
