Las Vegas, Nevada.- Una de las mejores peleas del año se exhibió en UFC #256. El tijuanense, Brandon “The Assassin Baby” Moreno; y el brasileño, Deiveson Figueiredo, brindaron un combate de alta calidad por el cinturón de las 125 libras de peso, mismo que terminó con un empate mayoritario que le permite al sudamericano retener su campeonato.
El mexicano se convirtió en el primer guerrero azteca por nacimiento en disputar un campeonato de la promotora más importante de artes marciales mixtas, y no decepcionó en lo más mínimo. Encaró el duelo como el retador que tiene todo en contra, y se encargó de reafirmar porqué es el clasificado número de la división Mosca.
“The Assassin Baby” se encargó en el primer round de manejar la distancia sobre un peleador con amplio dominio del jiujitsu. Su estilo de boxeo fue ideal para emplear el jab y mantener la distancia a su favor por su mayor alcance. Golpes que le complicaban al brasileño llegar a la zona de combate donde más cómodo se siente.
En el segundo episodio Figueiredo mostró mayor agresividad y control de la pelea. En todo momento se enfiló hacia adelante para presionar al mexicano y colocarlo sobre la cerca para atacar con patadas. El cierre de Moreno fue bueno con una combinación que hizo daño, pero no fue suficiente para derribar al campeón defensor.
Deiveson continuó con el plan de presión intensa y patadas para arrinconar al tijuanense. Sin embargo a la mitad de la contienda, el brasileño impactó en la zona baja a Brandon Moreno y se interrumpió por algunos minutos la pelea. El tercero sobre la superficie le restó un punto a Figueiredo por la infracción.
Brandon retomó las riendas de la pelea con la fórmula que le dio resultado al inicio. Una significativa baja de ritmo en Figueiredo le permitió a Moreno tomar más riesgos y hacer un par de derribos inteligentes para asegurar irse adelante en las tarjetas con solo un round.
Los últimos cinco minutos, vitales en la decisión final de la pelea, se mostró a un “The Assassin Baby” muy disminuido en la pelea. El brasileño no dudó en aprovechar la ocasión y cerró fuerte la pelea con autoridad. Incluso en los últimos segundos derribó al tijuanense y lo colocó sobre la lona para castigarlo hasta el final del combate.
Al final un juez vio ganar al campeón defensor (48-46), mientras que los otros dos coincidieron en sus tarjetas (47-47).
Al finalizar la pelea, Brandon Moreno explicó que sintió dolor en el fatídico quinto round, por lo que no pudo sostener el gran ritmo de pelea que exhibió el orgulloso peleador mexicano.
Un combate de alta intensidad y con un gran sabor de boca para el tijuanense, que señaló que “necesitamos la revancha”.