Tijuana.- El boxeo femenil recordará a Jackie Nava como una pionera y ejemplo a seguir para generaciones de talentosas pugilistas que ya reclaman un puesto en la élite.
El entorno de la ‘Princesa Azteca’ ha tratado de encarar este compromiso como el más importante en una trayectoria de más de dos décadas y con más de 20 campeonatos conseguidos.
La ceremonia de pesaje reunió a los fieles seguidores de la carrera de la tijuanense en los encordados. La recibieron entre aplausos y una interminable fila de aspirantes a conseguir una firma o fotógrafa con la leyenda.
Jackie Nava detuvo la romana en 54 kilos con 900 gramos, en impecable condición física, como siempre. Desde Argentina se presentó Gloria Yancaqueo, para registrar un peso de 55.200. Todo en regla para el combate.
La tijuanense ha sido un ejemplo de profesionalismo y dedicación a su carrera. Ha cuidado durante años cada aspecto de su preparación en sus peleas. Y esta no podía ser la excepción.
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“Tengo un compromiso bien presente de que voy a hacer una gran pelea, es una responsabilidad arriba del ring. No lo veo como una despedida, lo veo como una pelea, que para mi es la más importante”, afirmó.
“El pesaje lo sentí igual. De la misma forma, la misma dinámica de siempre, el mismo protocolo. Todavía no asimilo que es la última vez que lo voy a hacer, pero lo es”, reflexionó con una dosis de nostalgia.
Analizó el combate como una “pelea difícil”. Describió a Gloria Yancaqueo como “una peleadora bastante fuerte. Yo nunca me confío en loa récords, pero sí he visto sus peleas”.
Nava busca colgar los guantes en plenitud de condiciones. Se siente capaz de seguir extendiendo su legado por lo menos un par de años más, sin embargo, ahora desea enfocarse en nuevos proyectos de su vida personal y profesional.
“Es una decisión que ya se tomó. Hay muchos proyectos que quiero atender, sé que tengo capacidad para continuar (boxeando), pero ya quiero darle prioridad a otras cosas”, indicó.
En la ceremonia de pesaje la acompañó su infalible equipo de trabajo que ha estado junto a ella en los momentos más gloriosos de su carrera. Mario Mendoza, Miguel Reyes y Raúl Robles.
“En todos los equipos de trabajo siempre hay discusiones, desacuerdos, pero siempre tratamos de salir adelante como sea”, finalizó.