Las lesiones en el montículo han castigado fuertemente a los Padres de San Diego. El abridor de los carmelitas en el primer juego de la Serie Divisionales ante los Dodgers de Los Ángeles, Mike Clevinger, detalló sobre sus problemas físicos en el codo de su brazo que lo obligaron a salir tras 24 lanzamientos. Solo un inning de actividad.

Comentó que después de acabar el primer rollo realizó algunos ejercicios de movilidad para tratar de reactivar su brazo y, al menos concluir la segunda entrada, pero no le fue posible.

“Esperaba que después de algunos lanzamientos, me empezara a sentir mejor. Trate de al menos salir y acabar la siguiente (entrada) pero la misma sensación (molestia) volvía”, señaló.

Detalló que en el segundo lanzamiento al parador en corto, Corey Seager, empezaron a salir a flote los malos físicos en su extremidad tras un golpe accidental con su rodilla.

“Sentí que pegué mi codo con la rodilla y creo que fue cuando empezó a regresar. No estuvo tan mal. Seguía lanzando 94-95 (millas por hora), pero comenzó acrecentarse y fue cuando quería ya acabar el inning para ir al túnel y poder trabajar en ello para regresar bien”, apuntó.

Al concluir la temporada regular de las Grandes Ligas inició su terapia de recuperación para tratar de participar en alguno de los juegos divisionales.

Después de su inyección de cortisona en su codo la semana pasada, logró lanzar entre 25 y 30 ocasiones en las sesiones de prueba más el calentamiento sin aquejar dolor. Confía que pueda estar de vuelta pronto para ser una opción de Tingler en el montículo, panorama que se vislumbra complicado, no solo por la naturaleza de la lesión, sino por el desarrollo propio de la serie que puede que no llegue al quinto encuentro.

“No me voy a dar por vencido, y creo que nadie del equipo lo hará”, dijo el lanzador. “Ha sido mucho pero para esto te preparas”, añadió.

Clevinger comentó que buscará corregir su coordinación motriz y reposicionar su cuerpo en el movimiento de lanzamiento que realiza para evitar exponer su articulación a un estrés que pueda desembocar en una problemática similar.

“SUNSHINE”

Mike Clevinger se adjudicó en esta temporada tres victorias y dos descalabros para promediar 3.02 carreras limpias permitidas por partido. Disputó ocho encuentros, todos ellos como abridor indios de Cleveland y Padres de San Diego