Marcos Romero
Tijuana.- Maximiliano Vega Amador cosechó en la disciplina de natación un total de 11 medallas en su participación de la pasada Olimpiada Nacional 2018, más que cualquiera de los otros 897 deportistas que representaron a Baja California en la justa anual, por lo que fue acreedor a un reconocimiento por su gran actuación en la ceremonia de “Excelencia Deportiva”, que le fue otorgada por parte del Instituto del Deporte y la Cultura Física de Baja California (Indebc).
“Hemos trabajado duro por esto. Mis padres, mi entrenador y yo hemos trabajado juntos para obtener este tipo de desempeños en alberca. Sin ellos no estaría aquí presente”, comentó conmovido Maximiliano Vega momentos después de recibir su reconocimiento.
En la Olimpiada Nacional que se realizó en Chihuahua como sede principal, Aguascalientes, Quintana Roo, Estado de México y Querétaro, Vega Amador obtuvo siete medallas de oro y cuatro de plata reconociendo que dicha cifra sería imposible sin el apoyo de su familia y su entrenador, Erick Galván.
El siguiente objetivo, en palabras de nadador de Rosarito, es seguir trabajando enfocándose en el Campeonato Nacional de Natación 2018, evento que se va a realizar en el mes de diciembre en Veracruz, y el Mundial Juvenil del próximo año.
Maximiliano Vega inició en la natación gracias a un campamento de verano que se llevó a cabo en el municipio de Playas de Rosarito cuando él tenía seis años. Al cumplir los ocho años de edad, sus padres lo inscribieron a clases de natación, por el gusto que este tenía por nadar, sin saber que le abrirían las puertas al mundo de la natación competitiva.