Marcos Romero
Tijuana.- El defensor central de los Xoloitzcuintles de Tijuana, Hiram Muñoz, habló para la revista XoloMagazine sobre sus inicios en el balompié y los duros obstáculos que tuvo que superar para poder llegar a disputar un encuentro en el máximo circuito del futbol mexicano.
“Gracias a Dios yo empecé en esto del futbol por mi papá, su familia siempre ha sido muy futbolera”, dijo el defensor rojinegro. “Él me inculcó todo lo que tiene que ver con el deporte para jugarlo. Empecé desde chico, iba a los parques con mi papá para aprender”, resaltó.
A los 15 años de edad tomó la dura decisión de salir de su casa en busca de un sueño que se le negaría en primera instancia en México, viéndose obligado a agarrar sus maletas llenas de sueños por cumplir con una sola idea en su cabeza. Jugar futbol.
“Yo lo único que pensaba era en seguir jugando, afortunadamente lo termine haciendo en Washington con DC United. Fue una experiencia bonita, porque fue conocer otro lugar, otras cosas, te tienes que adaptar a otro lenguaje y lo que conlleva hacer un cambio así”.
Curiosamente la misma puerta que en su momento se le cerro, se abrió gracias a las amistades que formó en Monterrey, equipo donde estuvo en la Sub 17 solo un torneo y que decidió no incluirlo en planes. Raúl Chabrand dirigió con los regiomontanos en la categoría Sub 20, pero encontraría en Tijuana una nueva oportunidad de trabajo, dándole una segunda oportunidad a Muñoz de demostrar sus habilidades futbolísticas.
“Para mí significa mucho, es el equipo en el que debuté, aquí me dieron la oportunidad que estuve buscando tras muchos esfuerzos y tras pasar por muchos lugares. Significa Tijuana para mí la oportunidad y el voto de confianza que juego a juego lo defiendo o trato de estar a la altura de esta institución”, concluyó.
