San Diego.- Cuando Yu Darvish llegó a los Padres de San Diego vía cambio, era evidente que tenían al lanzador número uno del staff de abridores.
Su experiencia y extenso repertorio le hacen siempre un pitcher difícil de descifrar y así se vio en el inicio de la temporada.
En abril, mayo y junio, Darvish puso los números esperados. Su porcentaje de carreras limpias estaba por debajo de 3 y tenía una marca de 7 victorias y 2 derrotas solamente.
Desde entonces su trabajo en los encuentros se ha prologando, ha realizado muchos envíos, no ha dejado de batallar para encontrar la zona de strike y no ha tenido otra decisión positiva.
En cinco aperturas en julio tuvo una marca de 0-4 con una efectividad de 7.36, todo esto en 25 entradas y dos tercios de labor; en agosto solamente tuvo tres salidas tras presentar una lesión por segunda ocasión en el año y perdió en par de esas apariciones, teniendo un ERA de 6.32 en 15 innings y dos tercios.
“Las modificaciones que tengo que hacer por la lesión, eso influye en la mecánica, debo cambiar cosas para no volver a lesionarme, es un cambio drástico y ha sido una batalla para mí”, dijo Yu Darvish tras su más reciente salida a la lomita de los disparos, el 1 de septiembre ante los Diamondbacks de Arizona, donde también perdió.
En ese juego solamente aguantó 2 entradas y dos tercios, le hicieron 6 carreras en 8 hits, 5 de esas anotaciones fueron limpias, le pegaron un cuadrangular, dio una base y ponchó a 3 enemigos.
Y es que la lesión en la espalda baja presentada en par de ocasiones en la temporada le ha afectado. Se reporta que es un problema degenerativo, común en los seres humanos de 35 años de edad como él, pero no ha podido encontrar la mecánica correcta para desempeñarse de la mejor manera.
“En lo que se refiere a mi confianza obviamente no está muy alta en este momento”, expresó visiblemente preocupado.
Trataré de retomar el camino y trabajar en unas cosas, al final debes de identificar el problema, trabajarlo y regresar al camino correcto
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Si bien, ha sido honesto y sincero con su situación actual, los Padres de San Diego necesitan de él para poder meterse a postemporada. Blake Snell parece haber encontrado su ritmo y Joe Musgrove consistencia, falta que Yu Darvish corrija para ser efectivo en medio de una lucha cerrada por el último lugar para playoffs en la Liga Nacional.
“Obviamente ves hoy y en los últimos dos meses no he podido tener buenas actuaciones de la manera que quisiera y sé donde estoy y entiendo dónde estoy, pero los otros abridores lo han hecho muy bien y para mí lo importante es tratar de regresar al camino y contribuir al equipo”, concluyó un pitcher veterano que todavía tiene mucho diamante por recorrer, la única duda es si su cuerpo lo dejará, al menos lo suficiente para aportar su talento a los frailes en lo que resta del 2021.