Puede que el nombre de “Gypsy Rose” te haga recordar aquella muchacha con cáncer que mandó a matar a su madre por haberle mentido durante años, y te habrás preguntando, ¿qué pasó con ella?
Pues la joven ha estado en la cárcel, pero muy pronto saldrá de ahí.
Autoridades han confirmado que el próximo 31 de diciembre de este año, Gypsy Rose saldrá en libertad condicional después de haber cumplido 10 años en la cárcel, aunque ella aún tendrá que estar bajo supervisión de libertad condicional hasta 2024.
Si no recuerdas mucho los motivos de esta joven por querer asesinar a su madre, aquí te contamos un poco del caso.
¿Cómo inició todo?
Este caso se inició cuando Gypsy Rose, a los tres meses de vida, fue llevada por su madre Dee Dee al hospital al tener dudas si tenía complicaciones con su sistema respiratorio. Luego de pasar por un diagnóstico de apnea del sueño, fue enviada a casa con un aparato respiratorio.
Empezó a utilizar una silla de ruedas después de que su madre les dijese a sus familiares que tenía un trastorno cromosómico y que no se desarrollaría como los demás niños. Al recibir una medicación la cual no le correspondía sufrió la caída de sus dientes, sin dejar de mencionar que la niña no le iba bien en la escuela.
Entre las enfermedades y síntomas que su madre inventó sobre Gypsy Rose se encontraban los ataques epilépticos o la distrofia muscular. Los medicamentos que le recetaron para dichos ataques provocaron que se le cayeran los dientes.
La niña fue obligada a recibir educación desde casa, sin que pudiera conocer más personas o socializar dado que según su mamá tenía problemas de aprendizaje.
Gypsy Rose pasó de ser una convaleciente a la autora intelectual del crimen
A medida que Gypsy Rose se hacía mayor, Dee Dee recurrió a la violencia para controlar a su hija. Entre otras agresiones, la joven llegó a estar encadenada a su cama dos semanas cuando intentó huir de su madre.
Tras conocer y enamorarse por internet de Nicholas Godejohn, de 23 años y con antecedentes penales, Gypsy Rose le confesó todos los abusos a los que había sido sometida. Aunque su madre trató de impedir la relación, los dos jóvenes planearon la vía de escape, y fue el matar a su madre.
El asesinato tuvo lugar el 12 de junio de 2015, cuando Godejohn accedió a la casa de Gypsy mientras su madre dormía, y la apuñaló en 17 ocasiones.
Tras el crimen, la pareja huyó a Wisconsin, donde fue localizada por la policía y se destapó la verdadera situación de Gypsy. Durante el juicio, la joven se ganó la simpatía del jurado debido al abuso que había sufrido durante años por parte de su madre, y se le concedió un acuerdo para aceptar una sentencia de diez años por asesinato en segundo grado, que aceptó.
Godejohn acusó a Gypsy de ser la autora intelectual del asesinato de su madre, mientras que él solo “hizo lo que le dijeron”. Sin embargo, Gypsy comentó en la entrevista que “hay una gran diferencia entre alguien que le pide a otra persona que mate a alguien y quien de verdad lo hace. (...) Yo no mataría a nadie. Nunca podría hacerlo físicamente”.
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Gypsy está cumpliendo una pena de 10 años en prisión tras declararse culpable de asesinato en segundo grado, mientras que Nicholas Godejohn recibió una condena de cadena perpetua por asesinato en primer grado.
En una entrevista que le realizaron en el 2018, confesó a un medio estadounidense que pese a estar presa se sentía con más libertad que afuera cuando estaba bajo el cuidado de su madre.
