Los representantes comunistas en el consejo municipal de París pedirán la clausura de "una casa de citas de nueva generación" que abrió sus puertas recientemente bajo el estatuto de "sala de juegos" y que ofrece los servicios con "prostitutas de silicona".
"Primera en su tipo en territorio francés", la empresa Xdolls propone desde principios de febrero y a diferentes tarifas, la oportunidad que sus clientes se encuentren en un discreto apartamento con muñecas a escala humana.
El local abrió bajo el estatuto de "sala de juegos" y sus críticos consideran que "distorsiona la ley al proponer a los clientes en un lugar cerrado prostitutas de silicona", lamentó el grupo comunista.
Estos representantes quieren pedir esta semana a la municipalidad de París que "revise los procedimientos jurídicos" con miras a cerrarlo.
Según el presidente del grupo, Nicolas Bonnet-Oulaldj, estas muñecas alquiladas por hora "reflejan una imagen degradante de las mujeres, con ambientes sonoros que pueden hacer alusión a la violación".
"Queremos una aclaración con respecto a la ley", agregó ante la prensa.
Al ser consultado sobre este tema, el gobierno de la alcaldesa socialista Anne Hidalgo indicó que el caso estaba "lejos de ser una de las preocupaciones municipales".
"Querer prohibir un comercio de productos sexuales, que además tiene que ver con la libertad individual entre adultos que consienten, no es legal", reaccionó por su lado el presidente del grupo centrista UDI-Modem en el Consejo Municipal, Eric Azière.
"Estamos asfixiados en Francia por esta hiperregulación que prohíbe todo, empezando por el placer ... 50 años después de Mayo de 1968 ... ¡es una pena!", ironizó el político.