Para el cierre de este año, la marca de smartphones OPPO se ve como la número uno en el mercado mexicano, lo que significa desbancar a gigantes como Motorola y Samsung que, en conjunto, concentran casi 57 por ciento de la venta de equipos en el país.
Ser número uno en México fue el objetivo que nos pusimos para el tercer año de negocio en el país dijo en entrevista con El Sol de México Eduardo Morones, CEO de OPPO en el país
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Al cierre de 2021, la compañía de origen chino tuvo una participación de mercado de 10 por ciento, lo que la ubica en el quinto lugar entre las empresas que juegan en el país, superando a Huawei y cerca de Apple y Xiaomi, de acuerdo con datos de The Competitive Intelligence Unit .
Para lograr su objetivo, la compañía deberá superar también a Motorola y Samsung, los gigantes que han dominado el mercado nacional. Morones confía en que pueden lograrlo, ya que solo en dos años de presencia se ubicaron entre las cinco principales marcas, pese a llegar a territorio nacional en plena pandemia.
Recordó que OPPO inició operaciones en el país entre abril y mayo de 2020, en plena Jornada Nacional de Sana Distancia, que llevó al confinamiento a millones de mexicano y desplomó a la economía.
“Empezamos lento. Iniciamos con tiendas cerradas, con problemas de logística y parando entregas, pero a partir del tercer y cuarto trimestre de ese año el crecimiento fue acelerado y exponencial”, dijo.
Entre los aspectos que Morones destaca del trabajo de la compañía está el haber comenzado con un equipo robusto y enfocarse a las principales ciudades del país.
“Nos posicionamos muy rápido, fue la apuesta de la compañía, ir por la fuerza de ventas y la estructura del equipo, además de darle la oportunidad al cliente de que nos conociera”.
Además, refirió que OPPO se ha enfocado en los equipos de gama media, el segmento al que, recordó, se le conoció como “el valle de la muerte”, porque antes no había tantos dispositivos, pero ahora significan más de 60 por ciento de las ventas de smartphones. Dentro de este segmento, la empresa destaca a su familia Reno, con precios de entre ocho y 15 mil pesos y que pueden competir en calidad y diseño con equipos de más de 30 mil pesos, dijo el directivo.
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La principal batalla de OPPO, apuntó, vendrá en la gama media alta, con su familia Find X, teléfonos arriba de 15 mil pesos pero con el mayor desempeño y calidad en el mercado.
Destacó que pese a jugar principalmente en la gama media, OPPO ha destacado por sus equipos que suelen ser menos plastificados, con diseños más atractivos y mayor durabilidad. Estas cualidades le permitieron crecer durante la pandemia, cuando los usuarios mexicanos buscaron dispositivos más resistentes y veloces para trabajar y estudiar en casa.
A pesar de la inflación y los problemas de suministro y logística globales, descartó que OPPO tenga problemas de crecimiento este año o en adelante.
Incluso mencionó que la empresa trabaja para traer todo su portafolio de productos al país, incluidos los dispositivos de Internet de las Cosas (IoT), smartwatches, y otros productos innovadores.
“A nivel mundial invertimos más de siete billones de dólares en nuevas tecnologías, como carga rápida, inteligencia artificial y mejores experiencias de cámara y video. La intención es seguir siendo innovadores en esta industria y en el tema de la calidad”, sostuvo.
Apuntó que OPPO tiene la tasa de retorno más baja de la industria, es decir, que los usuarios casi no devuelven sus equipos. A esto añadió que al utilizar el sistema operativo Android, de Google, están obligados a tener mejoras constantes y automáticas en su sotfware y desarrollar la mejor tecnología.
Finalmente, Morones destacó que México es uno de los países de mayor atención para la marca en el mundo y el principal en América Latina, al concentrar 70 por ciento del negocio de la región y se ha convertido en nación ancla para su crecimiento en el continente.
