Con un concierto inolvidable, se despidió José María Napoleón de la ciudad de Tijuana la noche del pasado 4 de diciembre de 2021 para continuar con la gira del adiós durante el primer semestre del 2022. Después de que su hijo José María (invitado especial) abriera con temas de su próximo material discográfico, el cantautor salió al escenario a las 10:00 de la noche en punto, interpretando “Ella se llamaba Martha”, recibiendo calurosos aplausos del público tijuanense.
“Cuando escribí esta canción, lo que menos quería era descubrirme, y que alguien supiera si había sufrido una pena de amor, y dije ‘¿cómo le hago?’, y repetí 40 veces su nombre, perdón ¡Tijuana!, me siento muy contento de estar aquí con todos ustedes, es un honor estar en esta ciudad, compartir el escenario con cada uno de ustedes, y bueno, es la última vez que estaré aquí, y siempre duele, pero en vez de sufrirlo quiero disfrutarlo plenamente, por eso quiero cantar estas canciones para todos ustedes, con el mismo corazón con el que empecé a cantar hace 52 años. era yo un jovencito cuando me fui de Aguascalientes, hoy que han pasado los años me doy cuenta que ha valido la pena, porque ustedes son el ingrediente principal de mi existencia. ¡Muchas gracias por abrazar mis canciones y por haber permitido que cantara tantos años, mi familia y yo les agradecemos de todo corazón, gracias”.
Durante dos horas de concierto, el hidrocálido hizo un recorrido musical de temas del ayer, hoy y siempre, las que el público cantó y disfrutó, sin dar crédito a que fuera la última vez, mientras aplaudían, gritaban piropos y hacían peticiones de esas canciones que no podían faltar.
El repertorio enlistó: “Atrévete”, “Amiga mía”, “Celos”, “Quisiera”, “Eres”, “Leña verde”, “30 años”, “Sin tu amor” (dedicada a su madre), “Lo que no fue no será”, “Mientras llueve”, “Y para qué”, (que hizo famosas su amigo José José), “Cuando se pierde un amigo” y “Pajarillo” (que se llamaba No sé), entre otras.
Napoleón, con el corazón en la mano agradeció a sus músicos que lo han acompañado a lo largo de su camino profesional, advirtió que en Tijuana tiene amigos que jamás olvida, platicó anécdotas de familia y amigos entrañables, e invitó a su hijo José María a cantar “Hombre”, aquel tema que ganó un honroso cuarto lugar en la OTI, que se convirtió en un éxito en vida, y lo acompañará hasta su último día, mencionó.
“Napo”, como le dicen los amigos, con el sentimiento a flor de piel, comentó: “Gracias por dejarme cantar aquí, sé que los voy a extrañar muchísimo, muchísimo, hasta siempre”, y cerró con el tema “Vive”, un himno a la vida, y que sus seguidores cantaron también. Al final abrió sus brazos, y llevó la mano a su corazón, dejando un pedacito de él en Tijuana, y retrataron a su público que nunca lo olvidará “Después de tanto”.