Andreína Longoria

Andrés Canalla es el proyecto de Aldo Andrés Camacho Allende, originario de la Ciudad de México. Con 14 años de trayectoria musical, hace 3 años decidió tomar su guitarra y emprender una carrera en solitario para experimentar otros géneros musicales.

“Yo empecé en el 2005 en un grupo que se llama ‘Tungas’, tocábamos punk rock tradicional, ahí fue donde aprendí a componer, y soy el vocalista de la banda, aunque ahora más esporádicamente tocamos, y ya no hacemos giras, la banda sigue vigente, logrando una base de fans alrededor del país muy importante en todo ese tiempo. Pero fue hace 3 años que yo decido dedicarme por completo a este proyecto en solitario; como solista no tengo guión, puedo hacer un tema del norteño si quiero o del género que sea”, explicó Andrés Canalla para El Sol de Tijuana.

Con la agrupación se presentó en festivales como: Vive Latino (2012, 2016), Semana de las Juventudes (2017), The Fest (Florida, 2014), Awesome Fest (San Diego, 2016), Fuerza Rock Tijuana (2015), además de realizar giras nacionales e internacionales en: Argentina, Estados Unidos, Guatemala, El Salvador, Nicaragua y Costa Rica.

Como solista ha lanzado seis sencillos oficiales y un “Split EP” en colaboración con “El club de las lágrimas”, otro de sus proyectos. Los últimos dos temas que ha promocionado han sido “La búsqueda del tiempo perdido” y “Quema la suerte”’ en colaboración con José Madero Vizcaíno, el ex vocalista de Panda. Ha tocado en treinta ciudades alrededor del país, y se ha presentado en países como Costa Rica, Colombia y Estados Unidos.

“Hasta ahora he sacado puros sencillos en las plataformas digitales, mi octavo sencillo “Quema la suerte”, y es un tema que produjo José Madero, lo grabamos en Monterrey, es una canción que más ha crecido en el día uno de lanzamiento, es divertida, y que habla de las supersticiones y la mala suerte, cuenta la historia de una persona que quiere encontrar el amor, y no sabe cómo, se desespera porque no lo encuentra”, enfatizó Andrés, quien se proyecta en este tema, al no encontrar el verdadero amor y apapacho.

El joven cantautor además ha interpretado temas de Shakira o de Valentín Elizalde, y al respecto dijo: “La cultura latina tiene mucha riqueza, y creo que una canción tiene vida en sí misma más allá del género, tengo temas que podrían ser interpretados en distintos géneros, pero lo que importa es el fondo de la canción, la melodía y la letra”.

Canalla se siente afortunado de contar con la amistad de José Madero y comentó: “Desde que yo saqué mi primer sencillo como solista, él me empezó a seguirme en internet, y empezamos a hablar, me expresó que le gustaba mi música, y le fui pasando mis canciones que iba escribiendo, y compartimos nuestros gustos por las letras de los temas, después me invitó a abrir conciertos y tenemos una amistad”.

“Mis letras están inspiradas en cosas que me están pasando, y trato de verlas desde un enfoque distinto, siempre estoy tratando de escribir canciones de algo que tengamos en común todas las personas, pero decirlo en una forma que no lo digan todas las personas”.

Dentro del repertorio que ha lanzado Andrés está “La canción más triste del mundo”, es un título que seleccionó el cantautor que ha logrado que la gente se identifique y tenga curiosidad por escucharlo. “Dicen que el arte viene del sufrimiento humano, porque es el momento cuando más lo necesitas, como artista, y a los demás para sentirse mejor”.

“Ahora la gente hace playlist, puede escoger canciones de cualquier género, y los jóvenes de ahora no se casan con un solo tipo de música, tienen reguetón, rock, rap y pop”.

Canalla se visualiza como un Joaquín Sabina o Andrés Calamaro, reconocidos por la manera que componen, respetados, además que incursionaron en distintos géneros. Y un día no muy lejano llenar el Metropólitan, pero por lo pronto va por El Lunario para el 2020.

El cantautor dejó el siguiente mensaje: “Hagan lo que sientan que los sane por dentro, la vida es muy corta para no dedicarte a lo que amas”, finalizó Canalla, quien recientemente se presentó con éxito en Tijuana para promocionar “Quema la suerte”.