Ofrece amor de quilates; pide mano a cachanilla

Sergio Goyri viaja a Mexicali para visitar al padre de Lupita Arreola -empresaria inmobiliaria-, a fin de formalizar y pedirle su mano en matrimonio

  · viernes 5 de octubre de 2018

Un diamante y más si es de muchos quilates es buen pretexto para presumir y más si va formalizado con la promesa de un acta de matrimonio con el actor Sergio Goyri.

Después de dos nupcias, el galán de cine y televisión hizo un "viaje relámpago" a Mexicali para entregar anillo de compromiso y formalizar su relación con la cachanilla Lupita Arreola.

El intérprete y uno de los galanes más reconocidos en la pantalla chica en los ochenta en México estuvo el pasado el pasado fin de semana y en una cita formal, le pidió de manera seria la mano al padre de la ya futura señora Goyri.

"¿Cómo va el amor?", preguntó LA VOZ DE LA FRONTERA a Lupita Arreola, conocida en esta ciudad por su labor como propietaria de una agencia inmobiliaria y hace varios meses mantiene un romance con el actor y la mexicalense ha publicitado a través de su cuenta personal de Facebook.

Luciendo su anillo con un impresionante diamante, fue su respuesta a la cuestión del compromiso formal que ocurrió este fin de semana en selecto restaurante de carnes ubicado en La Gran Vía.

Presurosos, la noche del lunes la pareja arribó al aeropuerto Sánchez Taboada para abordar el vuelo comercial de Aeroméxico de las 23:10 horas con destino a la capital.

Este diario conversó con el actor para preguntarle sobre su actual quehacer actoral.

"Mucho trabajo afortunadamente", respondió, mientras revisaba en su celular mensajes de texto sin precisar sus actuales proyectos laborales.

Vestido en negro de pies a cabeza y maleta de mano Louis Vuitton, Goyri mantiene la famosa anatomía que lo hizo famoso en su juventud cuando fue descubierto por el desaparecido productor, Ernesto Alonso. A sus casi 60 años, robó miradas y murmullos con su paso ágil entre las mujeres en el corredor principal de la terminal aérea. Lo mismo pasó con su prometida, madre de tres hijos -de dos relaciones sentimentales-, pues cautivó con su impresionante silueta.