Tijuana.- Luego del derrame de aguas negras a causa de la ruptura de una tubería en Playas de Tijuana, aún no se tiene un plan para remediar el daño ecológico que causó en la vida marítima y en la playa, dijo Fernanda Rochín Bochm, coordinadora del programa Tijuana Waterkeeper, de Proyecto Fronterizo de Educación Ambiental (PFEA).
La fuga fue de ocho litros por segundo directo al mar, por un lapso de 15 días, tiempo que le tomó repararlo a la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), sin embargo, no se ha cuantificado el daño que ocasionó, añadió.
El derrame fue provocado por un desarrollador que realizaba movimientos de tierra y dañó la línea de conducción, informó en su momento la misma paraestatal.
Fernanda Rochín, coordinadora del programa Tijuana Waterkeeper, dijo que como medida preventiva han colocado letreros con advertencias para que las personas no ingresen al mar ni a la zona de la arena.
“Son letreros de contención para que la gente no se exponga, pero acciones de remediación no sabemos hasta ahora qué se vaya hacer”, indicó.
Las playas permanecen cerradas para el uso recreativo, y de acuerdo con los estudios que el PFEA realiza cada semana en cinco puntos de Playas de Tijuana, todos registran niveles de contaminación no aptos para su uso recreativo, subrayó.
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El punto con mayor nivel de contaminación es El Faro, la playa más cercana a los límites territoriales con Estados Unidos, así como el Vigía, Cañada Azteca, Parque México y Playa Blanca.
El Ayuntamiento de Tijuana colocó letreros de advertencia del agua contaminada en Vigía y Faro, donde informa del cierre por el riesgo sanitario que representa a los bañistas, comentó la ingeniera química.
Detalló que también hay un riesgo para la salud de las personas que ingresen a la arena, porque ésta funciona como esponja de los contaminantes bacteriológicos que contienen las aguas residuales, e incluso pueden trasladarse a través de la brisa.
En caso de ingresar a la playa bajo estas condiciones de contaminación, las personas pueden contraer enfermedades gastrointestinales, infección en la piel y ojos, lo que dependerá del tiempo de exposición, detalló la coordinadora del PFEA.
Recomendó no dejar tampoco que las mascotas se muevan en la arena porque podrían enfermarse con el simple hecho de que sus patas toquen la arena.