Vecinos de Villa del Campo enfrentan en su comunidad la falta de servicio de agua, recolección de basura, alumbrado, pavimentación y de un transporte público digno y eficiente.
La residente de la segunda sección de Villa de Campo, María de los Ángeles Moreno, denunció que desde hace un mes no hay agua en gran parte de la colonia, pero la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), solo se ha dedicado a culpar a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y no ha resuelto el asunto.
“Se imaginan con este calor, sin agua, sufriendo. Hemos tenido que comprar pipas que venden del agua, como de 100 a 120 pesos el tambo y a 40 el garrafón. Se aprovechan de nuestras necesidades”, expresó.
Pese a los informes que han dado a la CESPT, solo lograron que enviaran tres pipas para toda la colonia, siendo insuficiente para realizar sus necesidades más básicas.
“O se baña uno o lava la ropa, pero la prioridad viene siendo el sanitario. Los niños ya no fueron a la escuela los últimos días, porque o se bañaban o lavamos los uniformes”, manifestó.
Esta comunidad ubicada a una hora del Centro de Tijuana en automóvil, y a dos horas en transporte público, también sufren el deficiente alumbrado que hay en las principales vialidades, que han desencadenado en problemas de inseguridad.
“Es muy feo, todo obscuro, toda la calle principal está así y hay muchas mujeres que vienen del trabajo y han sufrido asaltos, que las han perseguido personas en la calle. Es muy fea la inseguridad en Villa del Campo”, comentó Martha Bautista.
Además de lo anterior expuesto, añadió las malas condiciones en que están las vialidades de la zona, pues denuncian que no han recibido ningún tipo de rehabilitación por más de 15 años, casi al inicio de que empezara a ser habitada esta zona.
“Las calles están todas muy feas, sobre todo la de La Misión. Necesitamos que pavimenten las principales, sobre todo las que están cerca de las escuelas”, apuntó.
Este lunes había una gran cantidad de bolsas de basura por afuera de las casas, porque después de cuatro días, el servicio de recolección no había pasado, presentándose focos de infección y malos olores.
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“No han venido, la gente sabe que viene la basura y todo esto es un cochinero, pero nos dicen que esto está pasando según por el cambio de gobierno”, declaró Rosario Redondo.
Otra preocupación de los vecinos de Villa del Campo es el poco transporte público que hay en el área, pues además de que no respetan el cupo de 12 personas en los taxis de ruta, después de las 19:00 horas ya no hay ninguna unidad disponible, mientras que los domingos no hay servicio, de acuerdo a lo expuesto por Joel Rivera.
“No se da abasto, queremos que metan a los taxis que quitaron del Agua Caliente, que no los metan para acá, aunque sea unos cafres, qué le hace, los necesitamos. Nos quedamos incomunicados, si me estoy muriendo cómo me van a llevar desde aquí”, lamentó.