Laura Bueno Medina
Tijuana.- La enfermedad vascular cerebral es, junto con la enfermedad cardiovascular, la principal causa de muerte a nivel mundial, y en México tiene una incidencia de 800 personas al año por cada cien mil habitantes, según informó el médico neurólogo, Rogelio Menchaca Díaz.
Durante una charla que ofreció en el Colegio Médico de Tijuana AC, que preside el Dr. Abraham Sánchez Frehem, Menchaca Díaz destacó que existe 25 por ciento de probabilidades de que una persona desarrolle un evento vascular cerebral en algún momento de su vida.
Asimismo, indicó que esta enfermedad es la principal causa de discapacidad en los adultos mayores en gran medida provocado por las secuelas de infartos cerebrales, embolias o hemorragias.
Por lo anterior, destacó la importancia de que toda la comunidad conozcan los rasgos distintivos de la enfermedad cardiovascular, ya que el reconocimiento temprano de sus manifestaciones ayudará a encontrar un tratamiento oportuno y, con ello, aumentar las posibilidades de supervivencia, menor discapacidad y mejorar la calidad de vida de las personas.
El también docente de la Universidad Autónoma de Baja California mencionó que, actualmente, el sector médico en la entidad está preparado para atender este tipo de problemas de salud, pues, incluso en la Cruz Roja, hay una sala de hemodinamia y un equipo de atención de la enfermedad cardiovascular, activos las 24 horas del día para atender los casos agudos.
Por su parte, el presidente del Colegio Médico de Tijuana comentó que la principal causa de estas enfermedades son complicaciones de una presión arterial elevada que no se ha manejado adecuadamente, por lo que las personas con hipertensión deben controlar sus nivele;y quienes ya llevan un tratamiento, revisar con su médico si han logrado las metas de control para evitar el riesgo de un accidente cerebrovascular.
Para concluir, Sánchez Frehem destacó que la finalidad de traer este tema a ese órgano colegiado es que los médicos de primer contacto tomen conciencia de la importancia de reconocer la enfermedad vascular cerebral de manera temprana, pues el tratamiento oportuno ayudará a revertir un cuadro de esta naturaleza; incluso, en casos graves.