El congreso del estado, analiza la posibilidad de establecer un registro de mascotas, con el fin de mantener un mayor control de los animales domésticos, esto, ante la proliferación de jaurías de perros y ataques a las personas.
La presidenta de la Comisión de Salud del congreso local, Montserrat Rodríguez Lorenzo, recibió a un grupo de veterinarios para conocer su opinión al respecto del padrón de mascotas, y en la que se comprometió a trabajar junto con ellos sobre el tema.
Víctor Quezada, presidente del Consejo Veterinario de Salud Pública de Baja California, comentó que si bien, hay que escuchar todas las voces, quienes hacen mayor trabajo en la protección de animales, son los médicos veterinarios que cuidan de su salud.
Mencionó que en realidad no hay un censo de mascotas, solo se habla de números estimados, a que se calcula que hay 0.4 perros por vivienda en ciertas colonias, y 0.7 perros en otras, siendo quienes tienen mayor cantidad de animales, las zonas de bajos recursos, por lo que se habla de números estratosféricos.
Los registros tienen protocolos que se tienen que llevar, por el censo, datos estadísticos para poder hacer estimaciones y proyecciones sobre donde se pueden estar dando las enfermedades, por lo que si se hace una base de datos, debe estar bien hecha, no registrar por registrar.
Informó que actualmente están trabajando en el diseño de un programa computacional para el registro y ofertarlo al gobierno municipal, o bien a todo el estado.
No solo se trata de insertar un microchip a los animales para poder recogerlos si están en la calle, sino saber quién es el dueño irresponsable y poder multarlo, el dispositivo electrónico también tendría un registro sobre su vacunación.
“El perro que no tenga registro va a tener que ser capturado para poner lo en adopción o en sacrificio, porque no hay sustentabilidad de tener tantos perros, ya se hizo un estimado de cuánto cuesta tener 150 perros por un año, cuesta 9 millones de pesos”.
Rafael Suárez Viramontes, asesor del Consejo Veterinario de Salud Pública de Baja California, advirtió de los primeros brotes de rabia silvestre en Estados Unidos, como es al Suroeste de Arizona, que se presentaban cada 10 años, pero actualmente es cada 5 años.
“No hay que olvidar el gran brote que se dio en Baja California, específicamente en Mexicali sobre rabia, que acabó con toda la población canina, fue realmente algo aposeótico, se dio por un coyote en el área de Jacumba que mordió a un perro se esparció la rabia a todo el estado, por eso no podemos bajar la guardia”.
Por ello, para poder seguir manteniendo cero casos de rabia, tienen que vacunar al 70 % de la población canina y felina estimada, pero ¿cuántos hay?, es necesario este dato para poder decir que se tiene que vacunar a cierto número.
Es por lo anterior que se debe tener un registro, y todos los profesionales de la salud, como la humana y la de protección al ambiente, deben trabajar juntos, ya que se trata de una sola salud, y recordó que aún hay riquetsiosis y no se ha hecho nada.
Por ello no solo se debe registrar por registrar, sino que se debe tomar en cuenta a la salud pública, la tenencia responsable y muchos requisitos más.
Tampoco se deben limitar a establecer un censo de razas peligrosas, ya que eso solo disminuye el universo de acción, ya que los perros que han masacrado a las personas, no son perros de raza, sino que se deben registrar a todos sin distingos a la hora de vacunarlos.
