Eliud Ávalos Matías
Tijuana.- Las privaciones ilegales de la libertad, en 2018, han aumentado en 30% en relación con el año pasado, señaló el licenciado Miguel Ángel Guerrero Castro, coordinador de subprocuraduría de investigaciones especiales y de personas desaparecidas.
Dijo que, en Tijuana, hay 850 reportes de personas no localizadas.
Sin embargo acotó que se trata de personas que se van por su propia voluntad. En cuanto a desapariciones forzadas, no hay ninguna.
Detalló que, en el caso de las privaciones ilegales de la libertad, son de 80 a 100 casos aunque, en este rubro, refirió que muchos ya aparecieron y muchos de estos están ligados al problema del narcomenudeo.
“Operan así. Si yo trabajo para determinada célula, los contrarios van y me levantan, me tienen privado de la libertad, y si no los matan, como ha sucedido en muchas ocasiones, los golpean o los obligan a que trabajen para ellos”.
Dijo que el aumento que se ha dado en este tipo de casos se debe también a la situación que se vive en Tijuana por el número de homicidios.
“El problema es el narcomenudeo, la droga; tienen una pugna entre ellos y para acomodarla eliminan personas o los obligan a que se unan a ellos”.
Aclaró que los intentos de secuestro que se han dado en los últimos meses no tienen nada que ver con el narcomenudeo aunque recordó que, en otros años, se cometía este delito para refinanciar las células o cárteles, como en 2008 o 2009.
Pero señala que ahora las bandas de secuestradores que han sido desmembradas no están ligadas al narcomenudeo.
“Afortunadamente se han frustrado ya varios intentos también, porque son personas que vienen fuera de la ciudad y no conocen la cuestión estratégica, y se ha respondido gracias a la denuncia y se puede rescatar a una víctima”.
El año pasado, dijo, se manejaron siete secuestros y, en este año sí ha habido un aumento, pero que han sido rescatados.