Laura Bueno Medina
Con el incremento de la demanda de servicios de salud mental, el gobierno estatal ha buscado la forma de incrementar la capacitación de los médicos de primer nivel para la detección oportuna de pacientes con estas patologías, a fin de que no se conviertan en casos graves, así lo mencionó el secretario de Salud, Caleb Cienfuegos Rascón.
“Es un problema que está creciendo tanto en su incidencia como en la morbilidad, cada vez es más frecuente este tipo de patologías y no únicamente en el estado de Baja California, sino en todo el mundo”, precisó el secretario de Salud.
La situación en Baja California identifica casos de depresión hasta condiciones muy específicas asociadas al consumo de drogas, que generan trastornos cerebrales muy graves, mismos que pueden ocasionar alteraciones permanentes para los pacientes.
El paciente empieza a referir preocupación constante, falta de sueño, enojo, ira, sentimiento de falta de valía, llanto recurrente, problemas con el alcohol o drogas, como síntomas de una condición que está afectando su salud mental. Es una radiografía de los casos que se están identificando en los centros de salud y hospitales, indicó el director médico del Instituto Estatal de Psiquiatría de Baja California (IEPBC), Marco Antonio García Enríquez.
También se presentan casos de pensamientos inapropiados, fuera de la realidad, sin embargo, estos son la menor cantidad, ya que en su mayoría los pacientes que llegan al instituto, mediante una referencia de un centro de salud u hospital, están relacionados con el padecimiento de una enfermedad crónica, por lo que su padecimiento de salud mental está asociado al deterioro de la calidad de vida por su enfermedad.
En la población de jóvenes menores de edad, la referencia es por problemas conductuales, por un ambiente familiar conflictuado, trasfondo afectivo emocional, déficit de atención por hiperactividad, entre otros.
El director médico del Instituto Estatal de Psiquiatría de Baja California (IEPBC), Marco Antonio García Enríquez, señaló que el instituto funciona por lo general como una institución de referencia, para que el Seguro Popular cubra la atención que se le brinda al paciente, debe estar referido de un centro de salud o del hospital general de la ciudad en cuestión.
Por el contrario, si el paciente llega solo y sin referencia al instituto, este deberá cubrir el costo de su tratamiento, ya que el IEPBC es un servicio subrogado por el Seguro Popular.
“De pacientes que abrieron expediente por primera vez en este año aquí en Tijuana, tenemos 720 hasta el momento”, precisando que el 80% son referidos de un centro de salud.
Un 5% llega en situación de urgencia, otro 5% derivado de un psicólogo particular, por la misión de accesibilidad se le atiende y se le orienta en caso de no poder cubrir el costo de la consulta para que tramite el Seguro Popular, asimismo hay otra cantidad similar que decide, aun teniendo otra derechohabiencia tratarse en el instituto, por lo prolongado de las citas.
Ricardo Cortes Alcalá, director de promoción de la salud de la Secretaria Federal, detalló en su más reciente visita a Tijuana que el tratamiento de las adicciones y las enfermedades mentales van de la mano, sobre todo, con la estrategia nacional de salud para todos.
“Estamos cambiando por completo, un giro que nos lleve a una dirección diferente, en donde en lugar de enfocarnos en los hospitales psiquiátricos de tercer nivel tenemos que llevar los servicios de salud mental a la comunidad”, dijo el director de promoción.
Para lo anterior, el equipo de primer nivel deberá tener las herramientas y habilidades para detectarlos signos de alarma que puedan apoyar la detección de pacientes con enfermedades de salud mental, desde la depresión, ansiedad, esquizofrenia.
Refirió también que en un segundo nivel de atención, la especialidad médica de psiquiatría debería tener camas censables como lo tienen otras especialidades, para que los pacientes que solo tienen este padecimiento puedan llevar su tratamiento de hospitalización.
En ambos niveles de competencia gubernamental se coincide en la necesidad de incrementar el recurso para la salud mental en los tres niveles de atención médica, ya que la necesidad así lo amerita, con más casos cada año, así como concientización para toda la población con el objetivo de derribar por fin el estigma sobre las enfermedades de salud mental.