Daniel Ángel Rubio
El sistema penitenciario del estado bajó en la calificación anual que otorga la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), pero le alcanzó para mantenerse detrás de las prisiones mejor evaluadas.
De acuerdo con el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2018, el estado obtuvo una calificación de 7.32 en la escala del 0 al 10, y se ubicó en el sexto lugar de la tabla.
En su comparativa anual la misma CNDH consignó cómo disminuyó la calificación de las cárceles bajacalifornianas, porque en 2017 tuvieron una calificación de 7.51, y en 2016 de 7.40.
El documento también refiere que de las 5 cárceles visitadas, el Centro de Reinserción Social “El Hongo III” en Tecate, fue el peor evaluado con 6.48, y el primer sitio lo obtuvo “El Hongo II”, con 8.36.
Y aunque algunas de las observaciones de la comisión cambian según la prisión, hay al menos dos que todas recibieron: faltan custodios y personal de seguridad, y los programas para prevención de adicciones y desintoxicación voluntaria son insuficientes.
Además durante las visitas, realizadas entre el 8 y el 13 de abril del 2018, la Comisión Nacional de Derechos Humanos encontró hacinamiento en 2 de las 5 prisiones: en el Centro de Reinserción Social de Mexicali, y en el “Lic. Jorge A. Duarte Castillo”, en Tijuana.
Reportó que en la prisión de la capital hay capacidad para 1,577 hombres y en ese momento había 2,261, además de 203 mujeres cuando el espacio para ellas alcanza para 183
En Tijuana dijo que había entonces 2,720 hombres cuando había capacidad para 2,202, y en el caso de las mujeres el espacio era para 269 pero había 360.