Según el gobierno del estado, los bares deberían estar cerrados en Baja California por la contingencia sanitaria del coronavirus, pero es una medida que en Playas de Rosarito no se respeta y este fin de semana estuvieron abiertos los bares en la zona turística de la ciudad, donde se congregaron cientos de turistas, principalmente mexicoamericanos que llegaron de California a la ciudad para pasar el fin de semana.
Al menos 10 bares de la zona turística estuvieron abiertos durante el sábado, los antros Bombay, Papas and Beer, Club Igys, que se encuentran en la calle Coronado y también estuvieron abiertos los centros nocturnos Boom Boom, Club Tequilas, Coco Beach, Aqua Bar, que están ubicados en la calle Nogal, así como los bares del bulevar Benito Juárez Macho Club Rosarito, La Vaquita, El Rey Store.
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Los centros nocturnos ofrecieron su servicio a turistas, principalmente la venta de bebidas con graduación alcohólica, pues en un recorrido realizado por El Sol de Tijuana no había consumo de alimentos como el atractivo principal dentro de los establecimientos, pues los llamados “jaladores” ofrecían descuentos en su primer consumo de bebidas alcohólicas en la calle Nogal, contrario a las declaraciones del gobernador Jaime Bonilla Valdez, que dijo no está permitida la reapertura de bares en Baja California.
Por la naturaleza de los centros nocturnos, los asistentes no respetaban una distancia entre ellos, el uso de cubrebocas era a criterio de las personas, pues unos utilizaban la mascarilla, pero otros estaban sin el uso de este artefacto de protección.
La alta música de los tres bares Boom Boom, Club Tequilas y Coco Beach, que están en contraesquina de las calles Nogal y Manuel Barbachano, retumbaban hasta las calles y era una atracción para turistas californianos que buscaban un bar para divertirse.
La tarde de este domingo, el gobernador del estado, Jaime Bonilla Valdez, durante su transmisión en vivo, al ser cuestionado sobre la reapertura de bares en Baja California por un usuario de la red social del Facebook bajo el nombre de Azrael Zumaya, aseguró que no está permitido.
“Aquí es muy importante entender que no es reapertura de bares, lo que ha pasado es que estamos analizando los restaurantes y los hoteles que tienen restaurante y que tienen un bar contiguo, del cual tienen mucho que perder si no conservan el protocolo, o sea, si les reaperturan el bar tienen que ellos respetar el protocolo del hotel, el restaurante y del bar, tienen que tener cámaras para que nosotros podamos monitorear si de verdad la administración está respetando el protocolo dictado por la Secretaría de Economía y del Trabajo, además obviamente la de Salud, que es la que autoriza el protocolo en últimas instancias".
El gobernador Jaime Bonilla reiteró "pero no se están reaperturando los bares, se están reaperturando negocios que están integrados dentro de ese mismo negocio que los mismos patrocinadores están pidiendo que se les autorice".
Sin embargo, los centros nocturnos que estuvieron abiertos, según su publicidad en redes sociales e impresas, el servicio principal es la venta de bebidas embriagantes y ofrecen comida como complemento al servicio principal, que es la diversión nocturna.
Durante esa misma transmisión en vivo, el secretario de Salud en el estado, Alonso Pérez Rico, reiteró que no hay bares abiertos.
“Se está analizando la factibilidad de que se pueda desarrollar esa actividad en una forma segura, que es lo que siempre venimos abogando, en punto número uno, los establecimientos que ahorita se dio autorización parcial para ver esa factibilidad, son establecimientos que tienen espacios al aire libre prácticamente, o con muy buena ventilación, con un aforo muy reducido y se están haciendo los estudios específicamente audio-métricos para ver cuál es exactamente el nivel de decibeles que se va a autorizar para que se lleve a cabo esa actividad”.
ABARROTADOS, SOBRERUEDAS
Las medidas sanitarias del coronavirus en el quinto municipio no se respetan durante la noche con bares abiertos, pero tampoco durante el día, pues el domingo el mercado sobreruedas ubicado en la calle Valente Cordero de la colonia Lucio Blanco, estuvo abarrotado por las miles de personas que acudieron a realizar compras esenciales como alimentos, pero otros lo toman como un paseo familiar, sin atender muchos de ellos los protocolos sanitarios.
El mercado conocido como el “Sobreruedas de la Lucio” es considerado unos de los más grandes de la región, pues en promedio son 10 cuadras de aproximadamente un kilómetro donde se instalan más de 500 vendedores ambulantes, en el lugar no había filtros sanitarios que revisaran el uso de cubrebocas.
La alta afluencia en el mercado sobreruedas de clientes no permitía guardar la distancia entre personas y caminaban entre los pequeños pasillos peatonales, el uso de cubrebocas quedaba a criterio de las personas, algunos lo portaban, otros no.
En Playas de Rosarito se vive como si el semáforo del coronavirus estuviera en verde, pues se registra alta movilidad y el semáforo del coronavirus rojo solo está escrito para las autoridades sanitarias, pues la movilidad aumentó este fin de semana.
Rosarito como en semáforo “verde”; el fin de semana hubo bares abiertos y mercados sobreruedas saturados de clientes a pesar de estar en alerta máxima según el gobierno estatal
