Karina Torres
San Diego.- El cierre de la frontera entre México y Estados Unidos continúa siendo una posibilidad que los agentes norteamericanos de inmigración podrían implementar, en caso de registrarse “una situación de riesgo” para los agentes o viajeros que utilizan los puertos internacionales de ingreso, aseguró Pete Flores, director de Operaciones de Campo de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de San Diego.
“Más de 100 mil viajeros utilizan este puerto de entrada todos los días, y tenemos una responsabilidad tanto de proteger la frontera, como las instalaciones y los visitantes que viajan todos los días. Tenemos la responsabilidad de la seguridad pública y la seguridad de nuestros agentes, así que si se presenta alguna situación aquí, que aparente lo que vimos en el ingreso de la caravana por Centroamérica hacia México, y que consideremos pongan en riesgo la seguridad de los viajeros y nuestros oficiales, entonces tomaremos las medidas necesarias para asegurar la integridad de la frontera y de quienes utilizan este puerto de entrada”, declaró Pete Flores en conferencia de prensa.
Conforme avanza la caravana migrante por el sur y centro del país, en la frontera norte con Estados Unidos la autoridad norteamericana ha reforzado la vigilancia y barreras que dividen a ambos países. La llegada de los elementos militares forma parte del reforzamiento instruido por el actual mandatario estadounidense, Donald Trump, para evitar el ingreso masivo de inmigrantes. El único acceso permitido, indicaron las autoridades, será a través de las garitas con la solicitud de asilo político.
Para procesar adecuadamente a las personas que buscan solicitar el ingreso a los Estados Unidos, así como a los individuos y familias que buscan asilo político, se requiere una atención detallada y adecuada (…) nadie tiene permitido el ingreso a los Estados Unidos hasta que él o ella cumplan con los requisitos de entrevista con los oficiales”, reiteró Flores.
MILITARES APOYARÁN A PATRULLA LA FRONTERIZA
Ante este escenario, los militares desplegados a lo lago de la frontera sur de los Estados Unidos cumplirán tareas de apoyo a los agentes de la Patrulla Fronteriza que resguardan los límites territoriales con México, explicó el teniente general Jeffrey S. Buchanan, comandante general del Ejército de los Estados Unidos del Norte.
“Estamos aquí para apoyar a la agencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), por lo que este es un apoyo militar a la misión de aplicación de la ley; no estamos aquí en una función de aplicación nosotros la ley; eso es algo muy importante para aclarar”, explicó Buchanan.
Se integrarán con ingenieros militares que apoyarán en el reforzamiento de zonas vulnerables a lo largo del muro divisorio, así como en el control de acceso de los puertos fronterizos y vigilancia a lo largo de la división entre ambos países. Además, contarán con helicópteros que permitirán mayores recorridos a ambas agencias a lo largo de la frontera con la intención de supervisar y resguardar la región.
Explicó que actualmente tienen un poco más de cinco mil 700 tropas desplegadas a lo largo de la frontera sur con México; mil 300 de ellos, en el estado de California. Todos permanecerán durante las próximas semanas en un periodo temporal que culmina el 15 de diciembre de este año.
CENTROS DE DETENCIÓN, A SU MÁXIMA capacidad
mientras la caravana migrante avanza con paso firme por el país hacia el norte de la república, los agentes de inmigración de los Estados Unidos dieron a conocer que los centros de detención, externos y pertenecientes al gobierno, se encuentran trabajando a su máxima capacidad, por lo que dependerá de la “disponibilidad de camas”, la recepción de migrantes para entrevistas y solicitud de asilo político.
“Continuamos trabajando con nuestros aliados en la localidad, como las fuerzas militares en México, para monitorear su avance y los grupos conforme avancen, y agradezco a las autoridades mexicanas que han ofrecido asilo a este grupo. Nuestro trabajo con las autoridades mexicanas locales nos ha permitido conocer que la situación de Tijuana es muy parecida a la de nosotros aquí en los Estados Unidos, y eso es que estamos a nuestra máxima capacidad. Los centros, tanto de organizaciones no gubernamentales, como los centros de detención, no cuentran con espacio para alojar más personas, razón por la cual han visto recientemente mayores esfuerzos en el tema, es que esto está quebrantando nuestro sistema”, aseguró Rodney Scott, jefe de la Patrulla Fronteriza en el sector de San Diego.
Aseguró que, junto con las autoridades mexicanas, continúan el monitoreo constante de la caravana tanto para conocer su trayecto como para identificar a posibles individuos que representen un riesgo al momento de llegar a la frontera.
Más de 100 mil viajeros utilizan el puerto de San Ysidro diariamente