Tijuana.- Una casa de acampar resalta del resto de las 100 carpas que están instaladas en el campamento migrante de la garita El Chaparral, sus residentes diarios colocan afuera de la carpa la imagen que llaman “La Guadalupana de los Migrantes”, así lo indica Elvira García, feligrés de la virgen mexicana.
“A ella le vengo pidiendo desde todo mi camino, que me cuide a mis hijos, y que pronto abran la frontera, yo creo y confío en la virgen que pronto abrirán las fronteras porque la virgen es bien milagrosa”, dijo la mujer que huyó de la violencia en su natal Guatemala.
Elvira García y su familia huyeron de la inseguridad y falta de oportunidades de Guatemala, solo cargaron poca ropa y la figura de la virgen morena que tenían en su casa, pero a medio camino la imagen no aguantó.
“Traíamos otra en el camino, pero la dejamos porque no podíamos traerla, pero ahí en Michoacán volvimos a comprar otra, hace ya ocho meses y desde allá la trajimos y aquí la tenemos”.
Desde Guatemala viajaron Elvira García con su esposo y sus tres hijos de 13, 11 y cuatro años, dicen que la estatua de virgen de Guadalupe ha recorrido sus alegrías, pero también las precarias condiciones del viaje por México, dicen que les hizo el milagro de llegar hasta Tijuana. “Aquí en Tijuana tengo cuatro meses, llegué con mi esposo y mis tres niños”.
En ocasiones esta familia no tenía alimentos, zapatos o ropa, pero la virgen del Tepeyac le dio a esta familia la esperanza de lograr el milagro de cruzar la frontera norte de México y cumplir el llamado sueño americano.
“No es algo que nos va a detener, vamos a luchar para poder entrar (a Estados Unidos), nada nos va a detener”. La discriminación y la violación de derechos humanos fue algo que pasaron en su trayecto por México, pero esta familia, con su ciega fe, espera llegar al otro lado de la frontera con Tijuana.
