El comercio ambulante dedicado a la elaboración y venta de alimentos también debe cumplir con el programa “Atrapa la grasa”, señaló Zaida López Sánchez, presidenta de la Cámara de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Tijuana.
Mencionó que debe de existir una regulación y control en general sobre el manejo de los desechos de aceite y grasas, para proteger el medio ambiente y el sistema de alcantarillado de la ciudad.
“Todos tenemos derecho a salir, trabajar, buscar una mejor vida, buscar un proyecto de trabajo (…) Pero es importante que todos cooperemos, estemos en el mismo carril, y busquemos estar debidamente capacitados e informados para poder cumplir con los lineamientos que solicitan las autoridades”, declaró López Sánchez.
Explicó que el programa consiste en colocar una caja que atrapa los residuos de aceites y las grasas que se utilizan durante el proceso de elaboración de alimentos y el lavado de los utensilios.
Al instalar esta trampa, evitan que los desechos se vayan al alcantarillado provocando que la red hidráulica se tape y cause daños ambientales por el desbordamiento de las aguas residuales.
La presidenta de la Canirac Tijuana dijo que están buscando la manera de que todos los establecimientos de comida estén regularizados, sin embargo, la autoridad encargada del comercio ambulante es el municipio.
Los comercios establecidos deben cumplir con el programa “Atrapa la grasa” o “Aguas residuales", para obtener el aval de Impacto Ambiental, permiso requerido para poder operar.
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Referente al programa “Aguas residuales”, es un requisito para los comercios que consumen más de 100 metros cúbicos mensualmente, procedimiento que es más largo y complejo, indicó López Sánchez.
Comentó que las multas a los comercios incumplidos a uno de estos lineamientos ambientales, rondan los 11 mil pesos.
Zaida López añadió que existen empresas dedicadas a la recolección e instalación de “atrapa grasas” certificadas, que le facilitan la instalación a los restauranteros.