Tijuana.- Inicia el periodo vacacional de verano, y a pesar del fácil a dispositivos móviles, tabletas y computadoras, los expertos en niñez y adolescencia señalan que lo recomendable para esta época del año lo mejor para su desarrollo son las actividades al aire libre y construir rutinas dentro del hogar, así como designar responsabilidades.
¿Por qué? ¿Cuáles son las consecuencias de una sobre exposición a internet desde muy temprana edad?
Erika Zamora Flores, psicóloga de niños y adolescentes del área de hospitalización en el Hospital de Salud Mental, explicó que los menores pueden sufrir afectaciones no solo psicológicas, sino también emocionales de pensamiento con respecto al aspecto físico, interacción social y dinámica familiar.
Sobre las afectaciones físicas la psicóloga dijo que al permanecer por tiempos prolongados frente a aparatos electrónicos la actividad disminuye, los cuerpos se vuelven torpes y lentos, además la falta de ejercicio puede generar obesidad.
“Además, en cuestión de pensamiento se puede distorsionar la información y creerse todo lo que se encuentra en redes sociales”, añadió.
Los menores pueden encontrar información no adecuada para su edad, incluso para los adolescentes, o temas no saludables para su mente como sexting, que consiste en el envío de fotos, videos o mensajes con contenido sexual y erótico personal, indicó Zamora Flores.
“Aunque sean adolescentes tampoco entienden y no saben cómo manejar esa información. Hay sobre estimulación de información que no es adecuada respecto a lo sexual, y hay mucha exposición en donde las y los adolescentes se pueden ver expuestos y vulnerables a abusos, violaciones por las exposiciones y terminar en una trata de blancas”, afirmó.
Sobre la edad recomendada para que los menores de edad puedan tener un dispositivo móvil, la psicóloga opinó que depende de los valores establecidos en cada familia.
Desde la experiencia de la psicóloga Zamora Flores, en algunas familias entregan tablets a niños de muy corta edad cuando esto puede traer afectaciones en el desarrollo cerebral de los pequeños.
“El cerebro necesita muchas sensaciones y movimiento. Un niño pequeño necesita moverse antes de llegar a un objeto físico, conocen mejor el mundo probando, tocando y viendo movimiento. Esto es mejor que ver movimiento a través de un aparato electrónico”, explicó.
A pesar de estas observaciones, muchos padres de familia otorgan aparatos electrónicos a sus hijos pequeños para mantenerlos ocupados o entretenidos.
“Más que discutir el punto, sería medir qué tanto le vamos a permitir”, agregó la psicóloga.
Jocabed Magañana Rodríguez, directora del Jardín de Niños Samuel Ramos Magaña en el turno vespertino, señaló que durante el periodo de confinamiento y clases en línea los pequeños tuvieron pocas estimulaciones y atención.
“Para los adultos es más fácil atenderlos dándoles un dispositivo. Me queda claro que es la primera respuesta del padre de familia, pero el niño en sí busca entretenerse, jugar y utilizar su imaginación”, destacó.
La directora explicó que el jardín de niños notaron que sus estudiantes, con tres y seis años de edad, sufrieron afectaciones motrices y cognitivas por el uso continuo de aparatos electrónicos.
En el regreso a las aulas esto dificultó el trabajo de las educadoras, incluso notaron que los resultados en las evaluaciones fueron bajos en comparación con otros años.
“Nos sentimos en deuda con la población del área donde yo trabajo, pero no había nada que pudiéramos hacer, no los teníamos y trabajamos con lo que había (...) Cuando entraron a clases presenciales se trabajó en su motricidad, su parte emocional y la parte cognitiva, pero los resultados no fueron los deseados”, agregó.
La psicóloga Zamora Flores recomendó a los padres de familia que en este periodo vacacional establezcan horarios y actividades, e incluso designar responsabilidades como los quehaceres del hogar y un periodo de descanso para convivencia.
Definir tiempos y controlar verdaderamente el acceso a internet y videojuegos de 30 a 45 minutos, teniendo además conocimiento de los juegos de sus hijos para que sean adecuados a su edad.
“Tal vez en la tarde se come, posteriormente pueden salir a jugar un rato si lo permiten las condiciones, recrearse con la naturaleza, leer un rato, darles un libro de acuerdo a su edad, una actividad educativa, alguna manualidad, tal vez otros 30 minutos de aparatos electrónicos”, agregó.
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También es importante que la red de Wi-Fi esté desconectada por la noche y que los aparatos electrónicos no se encuentren en las habitaciones de los menores, pues en esta parte del día la ociosidad y tentación es alta, añadió la especialista.
El uso de dispositivos electrónicos durante la noche genera cambios en el ciclo del sueño, provocando afectaciones en el estado emocional como irritabilidad, depresión y ansiedad.
“Hay que tener mucho cuidado, es importante tener una estructura, no me refiero a algo muy drástico o rígido, pero sí tener juego de actividades donde los niños y adolescentes sepan qué deben hacer. Les da dirección y mucha seguridad tener una estructura de límites de actividades”, agregó la psicóloga.
La directora Magaña Rodríguez, recomendó juegos de mesa, de representación de roles o fantasía, juegos simples pero básicos para el desarrollo de la imaginación y la creatividad.
El Jardín de Niños Samuel Ramos Magaña envió tareas y actividades para los niños de segundo y tercer grado de preescolar, principalmente juegos motrices, pues regularmente los padres de familia ponían a sus hijos a realizar planas y actividades en libros.
“Esta parte no nos ayudó a nosotros, hablando del nivel académico. La invitación es que hagan reglas en casa, rutinas de acciones de sus hijos. Encomiendas, recoger juguetes, sacar basura, limpiar el patio, darle de comer al perro, los juegos de mesa, juegos de patio, jugar a la escondidas, llevarlos al parque, más que la parte donde hagan planas o trabajos, porque el niño estaba harto de hacer trabajos repetitivos y monótonos”, explicó la directora.
Para concluir, Erika Zamora Flores mencionó que a grandes rasgos un niño que no realiza actividades de juego con su cuerpo ni interactúa con la naturaleza será un niño con carencia de habilidades y eso lo llevará a la adolescencia.
“También en la parte de la interacción social. Un organismo que se mueve más es saludable y con menos enfermedades físicas. En cuestión emocional y social a lo mejor los chicos de ahora que están tan encerrados la interacción social se verá limitada”, destacó.
Los futuros adultos, dijo Zamora Flores, no tendrán tanta apertura para adaptarse y su interacción social podrá verse limitada.
En cambio, los niños y adolescentes que practican juegos físicos desarrollan tolerancia, convivencia, empatía y desarrollaron liderazgo.
“No me puedo imaginar cómo serán estos niños y adolescentes cuando tengan que escalar desde abajo para llegar a un puesto a pesar de tener una licenciatura, maestría y doctorado, y que puedan entender que todo lleva un proceso y que no todo es inmediato”, finalizó.
