Los resultados de la tira indiscriminada de basura se pueden ver reflejados en los desarenadores de la ciudad. En éstos se puede apreciar cómo se siguen depositando residuos y demás desperdicios a la intemperie pese a la prohibición de hacerlo
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Sobre la calle 17, en la colonia Libertad parte baja, se repite la escena una y otra vez. Llantas, bolsas de plástico, zapatos inservibles y hasta un automóvil se pueden apreciar al interior de la construcción.
Para quienes habitan los alrededores del lugar ya no causa sorpresa, pero si indignación el hecho. El señor Lucio Almada, comenta. "Pocas veces lo respetan. Se han puesto letreros, lo limpian y vuelve a 'enmarranarse' de lo que usted se pueda imaginar".
El desarenador que se encuentra rodeado de casas, departamentos y a espaldas de una plaza comercial, es una fuente de infecciones al albergar moscas, mosquitos y ratas; según lo dicho por los afectados.
"Se llena de basura que 'malandros' traen de otros lugares. Por una feria lo dejan en los baldíos y aquí (desarenador). Es basura que no se llevan, muebles, llantas, a veces hasta escombro han sacado cuando limpian, y lo malo es que provoca que siempre este sucio", platicó, Eduardo, vecino del lugar.
Los filtros de concreto del desarenador lucen obstruidos de materiales pesados como metales de electrónicos, madera de muebles, así como por otros de menor tamaño, pero grandes en cantidad como botellas de plástico.
Por último, los vecinos denuncian que la falta de vigilancia policial es otra de las razones por las que sigue siendo posible que se deposite basura en la estructura.
