Crisstian Villicaña

Tijuana.- La situación de vida o muerte que atraviesan los migrantes centroamericanos en sus lugares de origen los obliga a salir huyendo, siendo los Estados Unidos su destino. En este intento, siguen siendo muchos los que a diario llegan a Tijuana en busca de cruzar de manera ilegal al país vecino; todo esto a pesar de las dificultades que implica burlar a la patrulla fronteriza, así como las condiciones climáticas.

Hugo Castro, director de Ángeles de la Frontera Tijuana, platicó. "Diario llegan cerca de diez migrantes, diario cruzan, unos se van por Playas, otros dicen que van a intentar por el lado de Tecate".

La desesperación que viven los migrantes se hace latente desde el momento que muchos no quieren esperar en territorio nacional, siendo la gran mayoría la que después de uno o dos días en algún albergue como el que dirige Castro, deciden intentar cruzar a Estados Unidos, ya sea para lograr su cometido de llegar con sus familiares o para entregarse a la patrulla fronteriza.

"Hay casos que son muy fuertes, donde la violencia extrema que está viviendo la gente hace su situación muy complicada. Muchos son lo que dicen que es mejor intentar llegar a Estados Unidos aunque eso signifique morir en el camino", subrayó

A la par de esta situación, están las personas que ya intentaron cruzar y tras no lograr su meta terminan siendo regresadas a México, encontrándose en su retorno con una falta de atención gubernamental, dando como resultado que estos migrantes formen parte de una población flotante, que no logra establecerse.

"No sé qué va a pasar, continúan las deportaciones, no tan intensas como en la época de Obama, pero todavía no hay un programa de apoyo integral a la comunidad migrante que no termina por incorporarse a la fuerza laboral", concluyó.