Laura Bueno Medina
Muchas de las causas que generan depresión a los jóvenes son temas tratables y prevenibles con una buena relación entre padre e hijo, exponen los especialistas del Hospital de Salud Mental de Tijuana.
El Hospital de Salud Mental de Tijuana manifiesta que se requiere de mayor atención en las conductas de los jóvenes para que la depresión no los arrastre a decisiones de mayor peligro como el suicidio.
El maestro en Terapia Cognitivo-conductual, Yahvé García, puntualizó en que el suicidio se puede prevenir estando alertas a los focos rojos, informó que desgraciadamente también en los adolescentes se ha ido incrementando esta conducta, ya que factores como no quedar en la escuela que ellos eligieron, el bullying o el entorno familiar problemático, contribuyen para que decida atentar contra su vida, “actualmente un 80% de nuestros pacientes adolescentes presentan ideación suicida”.
Existe una gran presión para los jóvenes desde que salen de la secundaria, porque ellos desean con mucho ánimo incursionar a una escuela específica por múltiples razones, pero la gran demanda que existe de espacios hace que no todos queden y esto los enfrenta a una realidad que no era la que esperaban, dijo el doctor García, como uno de los casos que pudiera parecer no necesario de intervención, pero la estabilidad emocional del joven puede no ser la adecuada y esto incidir en la situación.
De igual manera existen situaciones como el bullying y cyberbullying, que orillan a los jóvenes al encierro en algunos casos, la negación de querer ir a la escuela por miedo a ser víctimas.
Asimismo, indicó el psiquiatra, están los conflictos ya conocidos que afectan a los jóvenes como la separación de los padres, el maltrato físico y psicológico por parte de alguna persona cercana y la falta de autoestima.
El director del Hospital de Salud Mental de Tijuana, José Guadalupe Bustamante Moreno, mencionó que el tema del suicidio es un hecho que se refleja en la pérdida de la salud mental y es un fenómeno social que ha ido en aumento en los jóvenes por múltiples razones.
Para el nosocomio la situación requiere no solamente de la política pública para la prevención de la pérdida de la salud mental, sino del trabajo en casa y comunidades de la estabilidad emocional de los más jóvenes, ya que son los dependientes.
Un dato para poner atención es que en infantes y adolescentes la tendencia suicida se manifiesta en un 60% tan solo en el sector que ingresa a urgencias.
En consulta, de 10 pacientes, siete han tenido ideación suicida, lo que es diferente a la idea suicida, que se caracteriza por ya haber una planeación, y por último el intento de suicidio.