Crisstian Villicaña
Tijuana.- La mejor alternativa para que Baja California obtenga agua que pueda ser utilizada para el uso doméstico y el industrial es la agua desalada, por lo cual se debe apuntar a este método, así lo platicó Enrique Viveros, oceanólogo y consultor.
"Si no hay desaladoras, estamos 'fritos', porque no tenemos ningún río que nos llegue (en el caso de Ensenada); la única agua que llega es por el río Colorado pero es para el Valle de Mexicali y acá no tenemos ningún río, toda el agua se saca del subsuelo, y cada vez los pozos tienen menos agua y el agua más salada".
Sobre la opción de las aguas tratadas expuso: "Si están aprovechando, pero como esas aguas no van a llegar de consumo humano, que ni siquiera se pueden usar en cualquier cultivo porque si bien a lo mejor el cultivo si las acepta, por cuestiones de inocuidad alimentaría no serían aceptadas.
En cualquier lugar, aún con todas las medidas de seguridad que se cultivara un producto, sobre todo los que se consumen directamente en el momento que alguien del mercado, alguien que distribuye estos productos, principalmente a nivel internacional, producto que saben que el agua proviene de una planta de tratamiento, automáticamente se suspende.
Estamos en una situación en que si no usamos desaladoras, no vamos a tener agua, sobre todo para una población creciente. Una población creciente necesita obviamente de agua; la ocupas en la agricultura, las ocupas en los servicios, papelería, todo eso; en algunas industrias ocupas el agua".
El director de CIGA (Centro de Innovación y Gestión Ambiental), José Carmelo Zavala, dijo que el costo del agua desalada es costosa. Sobre esto opinó el oceanólogo: "Estamos en una zona semidesértica y en si el agua va a costar más cara, el agua de desaladora cuesta más que la de un pozo que nada más se extrae, claro que el gobierno buscará alternativas; a lo mejor no le puede cargar todo el costo en efectivo".