Juan Miguel Hernández
Tijuana.- Pese a la ligera disminución en el costo del combustible, para el sector transportista todavía es imposible bajar la tarifa del transporte.
Lo anterior lo aseguró el presidente de Grupo Calfia, Arturo “Napo” Aguirre González, quien precisó que la tarifa actual es de 14 pesos, cuatro pesos menos que el costo del diésel, que actualmente se vende en un promedio de 18 pesos.
El empresario transportista comparó la tarifa actual con la vigente a principios del año 2000. En aquellos años, la tarifa era de ocho pesos, mientras que el litro del diésel oscilaba los 10 pesos.
“Hay cuatrio pesos de diferencia entre la tarifa y el costo del litro; es muy difícil bajar la tarifa, porque el costo operativo de las unidades es muy alto. Hay mucha competencia, hay taxis piratas, invasión de rutas, que no nos permite pensar en una disminución de la tarifa en el grupo de transporte masivo”, aseveró.
En caso de que se homologue el costo del combustible en Tijuana,
Aguirre González afirmó, se podría plantear bajar la tarifa de transporte.
“Queremos pasajeros y menos costos operativos. Si nos baja el costo del combustible y (del) dólar, seremos los primeros en proponer la disminución. Somos tarifarios y mantenemos una tarifa, y bajar las tarifas por mutuo propio es una violación del reglamento, por lo que tiene que ser acuerdo de cabildo”, explicó.
Resaltó que las empresas transportistas cumplen con otorgar la tarifa especial a estudiantes, así como a personas de la tercera edad y con discapacidad.
De igual forma, dijo que la empresa Calfia ha invertido más de 150 millones de pesos en la adquisición de 100 unidades nuevas.