Tijuana.- Un grupo que se identificó como integrantes del Sindicato de Trabajadores del Sistema Nacional de la Salud (STSNS) se manifestó frente a la oficina del gobernador Jaime Bonilla Valdez para pedir que se les entregue una plaza a trabajadores de la salud que estuvieron al frente de la pandemia cuyos contratos laborales terminaron.
Abraham Vázquez García, uno de los afectados, dijo que atrás quedaron las felicitaciones y alardear del trabajo como enfermero por haber estado en la primera línea combatiendo el coronavirus en mayo del 2020, hoy se olvidaron de su trabajo y ser llamado héroe sin capa, pues sin previo aviso le notificaron que su contrato se había terminado.
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“Que se nos reinstalen en nuestros trabajos, ya que se nos despidió injustificadamente simplemente porque nos dijeron que había exceso de personal, se nos llamó y nos dijeron que si había algo nos llamarían; a la fecha no nos han llamado”.
Abraham Vázquez García tiene 25 años, llegó del estado de Guerrero a Baja California contratado como enfermero por la pandemia, su contrato terminó el pasado primero de 30 de junio, y al no tener familia en la entidad, tendrá una difícil situación económica para enfrentar sus principales gastos, como pago de renta y comida.
“El primero de julio se me llama para decirme que ya no tenía contrato vigente y que me retirara de las instalaciones del hospital, sin avisarme previamente, solo me avisaron que fuera con una persona para que me dieran un aviso. El aviso era que ya no tenía contrato vigente”, dijo el enfermero decepcionado.
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Por su parte, Teresa García Soto, líder del Sindicato de Trabajadores del Sistema Nacional de la Salud (STSNS), señaló que la protesta se debía también a que se creó este nuevo sindicato, pues consideraron que los trabajadores no son representados por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Salud (SNTSA). Piden a la autoridad estatal que se reconozca la fundación del nuevo sindicato.
“Aproximadamente tenemos más de 150 trabajadores, esto es porque no han permitido la entrada a las instituciones, pero tenemos más de cuatro mil trabajadores que están en espera de que nos presentemos porque quieren afilarse, que son la mayoría de los nueve mil trabajadores de la salud que están en espera para otorgarnos su afiliación en forma voluntaria y libre”.
Por su parte el secretario de Salud, Alonso Pérez Rico, indicó que en promedio son 400 enfermeros en Baja California los que se les terminará su contrato de trabajo debido a que los trabajadores basificados de salud que estaban en confinamiento regresarán a sus puestos por estar en semáforo verde.
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El titular de Salud mencionó que no hay condiciones para contratar a personal de salud, pues no hay plazas laborales, no hay un techo financiero y existe un orden de prelación de trabajadores para adquirir su base sindical, detalló que no puede justificar los contratos, pues estarían haciendo contrataciones dobles con una ocupación hospitalaria baja.
“Está sujeto a un escalafón de bases, yo no puedo decir vamos a basificar a todos porque hay mucha gente que está enfrente, y no hay base para todos, y más porque contratamos a personas durante un año y medio para cubrir las incidencias de los que se fueron a resguardar, hoy ya todos esos resguardados están regresando”, dijo Pérez Rico.
Finalizó que eran casos de contratos de enfermería y en el caso de médicos contratados, no existe un problema, toda vez que hay una carencia de esta profesión en Baja California y los médicos fueron reubicados a otras áreas.
