Crisstian Villicaña
Tijuana.- Don Martín lleva más de tres décadas vendiendo juguetes hechos de metal, rompecabezas hechos a manos que han divertido varias generaciones de niños.
Pese al paso de los años y los avances de la tecnología, sigue ofertando lo que mejor sabe hacer, juguetes artesanales, los cuales vende en distintos puntos de la ciudad como la avenida Constitución, en la calle tercera de la zona centro, desde ese espacio, bajo un sombrero y camisa a rayas, continúa de pie.
En una breve plática, nos habló que le gusta leer, sin embargo, su vista ya casi no se lo permite. En lo que respecta al negocio, dice que con los años se han disminuido las ventas, antes lograba sacar hasta cuatrocientos pesos al día, por allá de los ochentas y noventas, pero ahora, son cada menos los que compran una de sus creaciones.