Sentada en una de las bancas del Parque de la Ocho, Elizabeth Díaz, espera para ser llamada por una asociación civil que usó ese espacio como punto de reunión. Cerca de donde está la mujer de la tercera edad, hay un área verde que luce descuidada por falta de riego, con basura tirada y un bote que no se da abasto por la gran cantidad de desechos que hay en su interior.
Aunque no va tan frecuentemente al parque, dice que ha visto cómo gradualmente se ha ido deteriorando, y lo que era una alternativa para la ciudadanía, en especial para los adultos mayores como ella, ahora es un sitio sucio y que no representa un lugar digno para pasar un rato agradable.
“Está muy descuidado, a como empezaron sí está muy sucio. Está muy abandonado, necesita más atención, pero así está todo Tijuana”, expresó.
Elizabeth, desea que en el parque haya eventos culturales, actividades deportivas y todo tipo de alternativas que le den una nueva vida al espacio.
“Está muy descuidado para estar en esta área tan cerca de la Policía y de todo”, expresó.
No solo con el exceso de basura se encontrarán los ciudadanos como Elizabeth, también tendrán que estar en un sitio con grafiti, así como convivir con la presencia de personas en situación de calle, que ocupan espacios como el área de juegos infantiles.
“Me gustaría que esté más limpio, hay mucho cochinero, mucho malviviente aquí. Casi no vengo, y la rara vez que vengo me encuentro con lo mismo. Pero el Teniente Guerrero está peor, hay mucho vago”, externó Juan Loza.
A poco más de ocho años de haber sido inaugurado por el entonces presidente municipal de Tijuana, Jorge Astiazarán Orcí, el parque construido en lo que fueron las instalaciones de la Policía, cárcel, bomberos y talleres municipales, gradualmente se ha venido deteriorando, reconociendo las actuales autoridades de la delegación del Centro, que el problema de la basura, falta de mantenimiento y personas en situación de calle, es un asunto complejo de resolver.
“Todo proyecto de gobierno que no pone en la lista el mantenimiento, va a fracasar, porque se requiere dar seguimiento después de terminado y dar a un orden. Como sociedad también tenemos una responsabilidad, porque el ayuntamiento no tira la basura, el ayuntamiento recoge y trata de dar el mejor servicio a la ciudadanía. Si la gente no hace las tareas que corresponde, va a ser una tarea de nunca acabar”, expresó Martín Muñoz Avilés, delegado de la Zona Centro.
Sobre los residuos que hay en el Parque de la Ocho, aseguró que empleados de la delegación acuden diariamente a limpiar, no obstante, al igual que ese espacio, otros como el Parque Teniente Guerrero, es hogar de personas en situación de calle.
“Atienden el tema de los parques día a día, sin embargo, mientras siga habiendo gente viviendo en la calle, puedes limpiar y en unos minutos te encuentras igual y tristemente esto influye en tener un poco desordenado, pero se requiere el apoyo de la sociedad en general para minimizar ese impacto”, comentó.
En relación con el vandalismo que hay en el parque, así como las pocas actividades recreativas que actualmente se desarrollan, Muñoz Avilés, indicó que en el espacio suele haber vigilancia por parte de elementos de la Policía Comercial, en tanto que hay asociaciones civiles que realizan eventos artísticos y culturales.
“Muchas veces lo que sucede nos rebasa en los horarios de trabajo y en las noches se generan algunos problemas. Falta mucho por atender, mucho por aterrizar, sobre todo del trabajo entre sociedad y gobierno”, manifestó.
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El Parque de la Ocho cuenta con áreas verdes, espacio para juegos infantiles, instalaciones de la Policía y una plaza cívica, que tiene capacidad para aproximadamente 50 personas.
De igual manera, en una de las esquinas hay una estructura que se asemeja al acceso peatonal a Tijuana desde Estados Unidos.
