Uriel Saucedo
Tijuana.- El Sistema de Justicia Penal Acusatorio no es el responsable de que los homicidios sigan al alza, opinó el asesor en temas de seguridad Bernardo Gómez del Campo Díaz, quien, además, explicó que la importancia de la denuncia por parte de la ciudadanía ayuda a disminuir la cifra negra, y así las acciones de la policía pueden aumentar en los lugares donde hay una incidencia delictiva.
“Son muchos los estados en el país que manejan este mismo discurso, de que el Sistema Penal Acusatorio es el culpable, pero este sistema ha funcionado en muchos países de Latinoamérica que tiene(n) la misma idiosincrasia y comunidades similares a las de nosotros, y funciona”, enfatizó al mismo tiempo que cuestionó el talento humano en el tema de seguridad, ya que se debe observar el perfil de los mandos medios y el del secretario que se tiene para que puedan comparar la formación real del policía en el Sistema Penal Acusatorio.
Detalló que este sistema lo que busca es lograr que las personas puedan reinsertarse a la vida en comunidad privilegiando la libertad, pero no la impunidad. Puso como ejemplo el caso de una persona que delinque por primera vez y en lugar de que se le mande a un reclusorio por cuatro años, en donde adopte conocimientos en delincuencia que desconocía, se le beneficie llevando el proceso en libertad con algunas medidas cautelares y medidas de comportamiento.
También opinó que una de las cosas que sí se deben hacer consiste en reglamentar dicho sistema; específicamente, las medidas cautelares, medidas precautorias y medidas en libertad, dejando en claro que los casos de crimen organizado no entran en este tipo de sistema penal.
Por otra parte manifestó que la policía en Tijuana, más que medir el tiempo de reacción, debería trabajar en el tema de prevención. Asimismo, la ciudadanía debe trabajar en disminuir la cifra negra denunciando los delitos de los que sean víctimas, ya que si no se hace así, provocan a largo plazo un empoderamiento en la delincuencia, además de generar impunidad ocasionando que el delincuente repita sus actividades delictivas.