Tijuana.-Tras confirmarse que el cuerpo hallado en la canalización del Río Tijuana pertenecía a Kevin Yael, su padre pidió justicia y lamentó que le hayan arrebatado la vida a su hijo de 14 años, quien soñaba con ser boxeador profesional.
Abordado a las afueras del Servicio Médico Forense (Semefo), Erick Fabián González, padre del menor, condenó la respuesta tardía de las autoridades afirmando que otra podría haber sido la historia si la Policía Municipal hubiera atendido con más celeridad, ya que la desaparición fue reportada apenas una hora después y la corporación no respondió al llamado.
“Era un niño muy noble, trabajador, echaba la mano a su mamá. Estudiaba y soñaba ser boxeador. Entrenaba box y lamentablemente nos los arrebataron. Es un dolor muy fuerte, no le deseo a nadie perder a un hijo”, expresó.
Erick Fabián González negó que Kevin Yael se dedicara a vender gelatinas, como se manejó en un principio, aclarando que solo ayudaba a su mamá llevando el producto al lugar donde él labora.
ACCEDE A NUESTRA EDICIÓN DIGITAL ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!
Luego de confirmarse la muerte de su hijo, pidió que haya más operativos en la canalización del Río Tijuana para garantizar la seguridad de las personas que circulan por el área.
Ante los medios de comunicación también habló Yumaira García, quien destacó el acompañamiento de la ciudadanía.
“Quiero darle las gracias por estar aquí y por el seguimiento que le dieron a la búsqueda de mi hijo, simplemente es eso. No quiero más preguntas, tenemos que respetar el duelo que estamos viviendo mi esposo y yo. Gracias a todas las personas que nos ayudaron en todo este proceso que estamos llevando en este momento”, expresó.
En conferencia de prensa, el director estatal del Servicio Médico Forense, César González Vaca, precisó que la causa del deceso de Kevin fue traumatismo cerrado de tórax y abdomen.
Señaló que el menor tenía lesiones en pulmones, hígado y páncreas, que al final fueron mortales, provocando que perdiera la vida casi al instante.
Aclaró que no se puede determinar el número de golpes, aunque estimó al menos 10 en tórax y abdomen. Descartó heridas de arma de fuego, así como de tipo sexual.