Tijuana.- Paola Espinal es una de las muchas migrantes hondureñas que buscan conseguir asilo en Estados Unidos con miras a tener una mejor vida. Con la llegada de Joe Biden a la presidencia de ese país la esperanza de la también esposa y madre de tres hijos, crece.
La familia que arribó en enero del 2020 a Tijuana no pudo iniciar su proceso de asilo luego de la larga lista de espera para presentarse en la Garita de El Chaparral, la cual se vio interrumpida por el cierre que se dio en los puertos fronterizos de Estados Unidos con México, esto a causa de la pandemia del Covid-19.
“Ojalá que cambie esto con el nuevo presidente. Estoy esperando para ir al Chaparral y ver qué oportunidades van a dar para los que tenemos niños, de qué forma nos van ayudar”, dijo Paola.
“Venimos educadamente a pedir asilo en Estados Unidos para nuestros hijos, y lo vamos a lograr”, añadió la migrante hondureña, quien anhela que en las próximas semanas o meses haya un cambio en la política migratoria estadounidense, ya que las condiciones socioeconómicas en su país de origen son complicadas.
Pero la figura de Joe Biden como presidente de Estados Unidos no es necesariamente sinónimo de más oportunidades para los migrantes, consideró José María García Lara, director del albergue Movimiento Juventud 2000.
“La administración antes de Trump, donde estuvo Joe Biden como vicepresidente con Obama, hubo más deportaciones en el caso de mexicanos a nuestro país, ha sido uno de los impulsores de deportaciones, entonces vamos a ver si Biden reconoce lo que dijo en su discurso, que Estados Unidos es un país de migrantes”, observó.
El mismo García Lara finalizó diciendo que pese al antecedente de Biden como vicepresidente, la esperanza de que haya un cambio en el trato hacía los migrantes se mantiene viva.