Tijuana.- La migración de la ballena gris, desde Alaska hasta las costas de la península bajacaliforniana, inició esta temporada en medio de una tendencia a la baja de este mamífero que acude cada invierno a aguas menos frías para tener a sus crías.
En el 2016, la ballena gris, también conocida como la ballena mexicana, alcanzó su mayor registro con 27 mil ejemplares desde que se declaró en extinción y especie protegida en el año 1960.
Sin embargo, en los años posteriores su población ha tenido una tendencia a baja, al igual que en su reproducción.
La agencia de gobierno NOAA Fisheries, responsable de la administración de los recursos oceánicos de Estados Unidos, registró en 2019 por medio de una estación de monitoreo tan solo 17 mil nuevos ejemplares, sin que todavía se tenga certeza de qué provocó esta reducción.
NOAA Fisheries estimó que entre 2016 y 2022 hubo una baja del 38% en la población de la ballena, según una publicación en su portal, fechada el pasado mes de octubre.
Además en el 2019 contabilizó alrededor de 600 ejemplares muertos en la orilla del mar, una cifra de mortalidad que no se había presentado.
En las playas de Ensenada, en el periodo 2020-2021, se registraron varias muertes inusuales de ballenas jóvenes que presentaban menos peso del normal, dijo Guadalupe Gómez, vocal de Varamientos de Investigación y Conservación de Mamíferos Marinos de Ensenada, A.C.(CMME, A.C).
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“Lo relacionaron a que no tuvieran suficiente alimento en el norte, donde viven el resto del año porque hay más abundancia”, comentó.
Durante la migración a México, estos mamíferos se alimentan poco, entonces posiblemente ya no alcanzaron a regresar al norte, añadió Guadalupe Gómez.
A pesar de esta hipótesis, dijo, aún no se sabe con certeza cuáles son las causas de esas inusuales muertes.
“La mayoría de los registros que tenemos son por causas desconocidas”, afirmó la vocal de Varamientos.
Explicó que en el varamiento de animales marinos es difícil identificar la causa de muerte, ya que llegan en estado de descomposición avanzada a la orilla del mar.
En la temporada pasada, 2021-2022, una ballena quedó varada y tenía una herida provocada por un barco de grandes dimensiones, expuso como ejemplo, así que las causas pueden ser diversas.
BALLENA GRIS, ÍCONO DE BC
Denise Lubinsky, presidenta de CMME A.C., recomendó a las personas acudir presencias la llegada de las ballenas, uno de los animales marinos más grandes del planeta, por tratarse de una experiencia única y un contacto directo con la naturaleza.
“Es una especie impresionante”, dijo Denise Lubinsky.
Una ballena gris puede alcanzar los 15 metros de largo y pesar hasta 27 toneladas.
Como característica particular tiene manchas blancas y no sale en su totalidad del mar, en comparación con la llamada ballena jorobada, explicó la presidenta de CMME A.C.
La ballena gris se alimenta en su mayoría de crustáceos pequeños en el fondo del mar y rara vez lo hace en la superficie.
Una ballena gris puede alcanzar los 15 metros de largo y pesar hasta 27 toneladas.
Denise Lubinsky pidió a las personas interesadas en realizar el viaje hacerlo con empresas legales, que pueden ser identificadas porque portan una bandera con el permiso de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Explicó que esta certificación de las embarcaciones garantiza que tienen conocimiento de la norma 131 que establece cómo deben acercarse para no interferir en la trayectoria de los animales.
“Recordemos que vienen hembras apunto de parir y lo único que quieren es lograr llegar a aguas más tranquilas”, dijo Guadalupe Gómez vocal de Varamientos.
30 AÑOS DE AVISTAMIENTO
Horacio González Moncada, tiene 10 años como guía intérprete en el servicio de avistamiento de Ballena gris en la costa de Ensenada, en una de las 30 embarcaciones autorizadas por la Semarnat.
Relató que el recorrido dura aproximadamente cuatro horas en las que trasladan a las personas a la isla Todos Los Santos, donde pueden apreciar a los lobos marinos que habitan el lugar.
Después van mar adentro, hacia dónde pasan las ballenas en su trayecto a las lagunas Ojo de Libre y Banderas, para el nacimiento de los ballenatos.
Horacio González dijo que es notable la baja de esta especie en su habitual recorrido migratorio, pero espera que este año aumente.
Apuntó que el interés es de turistas de este mismo estado que quieren ver de cerca al animal más grande de la tierra.
“Este año ya estamos cerca del número de visitantes en comparación con antes de la pandemia, a falta de dos meses que concluya el avistamiento”, comentó.
PARA TOMAR EN CUENTA
En caso de encontrar algún animal muerto en las orillas del mar, en este caso una ballena gris, las personas deben marcar al 911 y no acercarse.
“Son animales marinos, que pueden contagiar de alguna enfermedad si las personas los llegan a tocar”, advirtió Guadalupe Góme.
CMME A.C está impulsando una campaña para informar a las personas lo que sí y lo que no deben hacer si ven un animal muerto en la orilla del mar, mencionó.
“Ya hemos tenido casos de ballenas varadas donde los padres de familia llevan a sus hijos y los dejan tocarlas. Incluso se suben encima, algo peligroso. No sabemos de qué murió”, dijo, Guadalupe Gómez.
Lamentó que no haya representación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en la costa de Baja California, porque es la autoridad encargada de atender los reportes acerca de animales muertos en la orilla del mar.
