Laura Bueno Medina
Tijuana.- El representante de la vinculación educativa de la Confederación Patronal Mexicana (Coparmex) Tijuana, Manuel Alejandro Flores Pérez, mencionó que el magisterio no debería usar como “rehén” la educación de los estudiantes con el fin de presionar al Gobierno de Baja California.
La suspensión de clases a la que llamó el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en Tijuana dejó sin clases a cuatro mil 772 alumnos de 332 escuelas de sostenimiento estatal.
Señaló que es lamentable que los docentes activos que sí están recibiendo su pago no se presenten a dar clases cuando esa es su responsabilidad principal.
De igual manera, realizaron una fuerte crítica a los gobiernos estatal y federal por la situación que impera de adeudos con los jubilados de la educación y trabajadores activos en el caso del subsistema Cecyte BC.
No obstante, sostuvo que afectar las clases incumpliendo con el calendario escolar es un daño directo a los estudiantes; sobre todo, cuando existe un sindicato que debe realizar la labor de reclamo de los derechos de los trabajadores de la educación.
Por tanto, y a modo de propuesta, la Coparmex expuso que el gobierno cumpla con sus obligaciones a la brevedad posible, y que los docentes activos regresen a las aulas privilegiando el derecho de los estudiantes a la educación.