Tijuana.- Es necesario que en Tijuana se establezca un protocolo para cerrar las playas cuando estas tengan niveles altos de contaminación no adecuados para su uso recreativo, de acuerdo con la ingeniera Fernanda Rochin Boch, encargada de laboratorio de Tijuana Waterkeeper dentro del Proyecto Fronterizo de Educación Ambiental (PFEA).
“Es importante contar con un protocolo, saber qué hacer en caso de que llegue a haber un incremento en la contaminación y que la ciudadanía tenga este poder de elegir esta información clara, que es uno de sus derechos, saber qué está pasando y que se dé de una manera oportuna”, explicó.
Rochin Boch indicó que, en la ciudad de San Diego California, por ejemplo, cuentan con los protocolos y medidas necesarias para el cierre y apertura de las playas.
“Hay dependencias en Estados Unidos, van y cierran las playas, ponen letreros, etc. Esos protocolos no existen en Tijuana”, detalló.
La ambientalista también destacó que, del otro lado de la frontera, cuando se presentan derrames de aguas residuales y situaciones dentro del protocolo que sea considerado un desastre o emergencia sanitaria se realiza un cierre previo de las playas.
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“No están asegurando que las playas estén contaminadas o no sean aptas, pero antes de que la gente ingrese se cierra para no poner en riesgo a la persona. Se hacen análisis, y después de los resultados se toman decisiones”, explicó.
La ingeniera mencionó que los protocolos recomendados en Tijuana deben estipular también el varamiento marino, y pesar de que existen protocolos para dar aviso a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), debe existir otra parte de las autoridades que esté involucrada en un protocolo.
“Un ejemplo podría ser que acordonan el área y las personas no se acerquen a este espacio”, agregó.
Desde el 2021 hasta la fecha, finalizó Rochin Boch, el PFEA ha encontrado a muchas especies sin vida en las playas, esto genera un foco de infección para las personas que pasan cerca de estos animales.
“De pronto nos toca que pasen semanas y no se retire este animal de las playas, hasta que llega la putrefacción o se queda el esqueleto, incluso hemos visto cosas crudas, como perros comiéndose a estos animales”, concluyó.
