Crisstian Villicaña | El Sol de Tijuana
Como cada año el albergue Movimiento Juventud 2000 celebra a la comunidad migrante que se encuentra bajo su cuidado, realizando una posada navideña que permita darle un rato agradable a las familias que se encuentran en tránsito.
José María García Lara, director del refugio, comentó acerca de la importancia de este evento. "Es para que los niños estén en un ratito de esparcimiento, un ratito de felicidad, ya que sus padres vienen de diferentes lugares tanto de México y el extranjero, que vienen con problemas muy fuertes y con una depresión muy complicada para cada uno de los papás y mamás que están aquí en el albergue".
Con actividades artísticas, juegos y comida, se le dio a las familias la oportunidad de celebrar y con ello dejar de lado, aunque sea por unos instantes las preocupaciones que rodean el viaje a un nuevo lugar donde rehacer la vida.
"En momento determinado que se sientan como si estuvieran en su casa, nosotros como organizaciones, la Alianza Migrante Tijuana, con nuestra compañera Lulú de Ángeles sin Frontera y con otros grupos hacemos este tipo de posadas, festejos navideños, ya que muchos de ellos deberían estar en sus comunidades o en sus casas".
En la actualidad el albergue hospeda a un total de 103 personas, de los cuales 53 son menores de edad y los otros 50 son adultos; una situación que se repite cuando familias enteras se ven forzadas a desplazarse de sus lugares de origen.
En torno a las necesidades que enfrenta el refugio migrante, agregó García Lara. "Uno de los grandes retos es que sigamos trabajando, sigamos siendo apoyados por las diferentes organizaciones religiosas o no religiosas que se suman aquí a este albergue para seguir atendiendo a las familias completas, principalmente a las mujeres y los niños que están aquí".