Tijuana.-Hace algunas semanas durante la visita del presidente de la República a Baja California, el gobernador del Estado, Jaime Bonilla Valdez, presumía que en la entidad no había violencia.
“En este estado hay paz social, hay necesidades, carencias, pero no hay violencia, la gente es muy respetuosa”, decía el mandatario durante la Inauguración del Cuartel de la Guardia Nacional Playas de Rosarito.
Pero el ejecutivo estatal se topó con la realidad del estado y particularmente de Tijuana, que fue ubicada como el municipio con más homicidios del país, según los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, que muestran que de enero a mayo, esta ciudad fronteriza acumuló un total de 749 ejecuciones
“Es una preocupación que estemos en una de las ciudades más violentas y ha sido por mucho tiempo y no podemos erradicar la inseguridad. Nadie está tratando de tapar el Sol con un dedo, pero sí es una situación de coordinación, entre la Guardia Nacional, Sedena, Fiscalía y Policías Municipales”, comentó durante su transmisión matutina al ser cuestionado del tema.
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Bonilla Valdez, no obstante, insistió en que 99% de los asesinatos tiene relación con el narcomenudeo y narcotráfico, aunque en ningún momento reveló alguna gráfica, investigación o estudio que reflejara su dicho.
“Son sobre una batalla territorial sobre el narcomenudeo. En las colonias, en algunas partes donde el narcotráfico y narcomenudeo es muy activo. Mientras no erradiquemos esos núcleos no podemos erradicar ese problema de homicidios”, manifestó.
Cabe mencionar que Mexicali y Ensenada también fueron colocados en la lista de los municipios más violentos de México, con 158 y 92 asesinatos, hasta mayo pasado.
