Temas de concesiones y asuntos que trascenderán a la próxima administración, deben atenderse entre el alcalde electo y la actual presidenta municipal, aseveró la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda.
La mandataria habló sobre lo ocurrido las últimas semanas en el Ayuntamiento de Tijuana, donde regidores de todas las fracciones políticas se han negado a asistir a las sesiones de Cabildo convocadas por Montserrat Caballero Ramírez.
“Entiendo que hay alguna situación en la cual se está buscando concesionar, durante no sé cuánto tiempo ciertos temas. Concesiones y demás, en estos momentos están fuera de lugar, sobre todo si van a trascender a otra administración”, comentó.
Aseguró que se debe priorizar las necesidades de la población, ante cualquier tipo de conflicto que pueda existir.
“Me parece que después de la elección debe ser ya el presidente electo y la presidenta municipal que lleguen a los acuerdos correspondientes”, agregó.
En otro tema, volvió a hablar sobre el Fideicomiso Empresarial del Estado (Fidem), insistiendo en que dichos recursos que ascienden este año a más de 170 millones de pesos deben ser invertidos en infraestructura educativa.
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“Esos recursos se tenían que invertir en necesidades sociales. Muchos de los proyectos que se han hecho con el Fidem han sido buenos, realmente ha habido cosas muy buenas, sin embargo, ha habido otras que ni al caso. Estoy muy en contra de que un grupo de personas ejerzan esos recursos públicos, porque se van a ejercer con discrecionalidad para ciertos proyectos. Mejor invirtamos esos recursos en infraestructura educativa”, concluyó.
En atención a medios previo a su participación en un evento de la Secretaría de Salud, destacó la relevancia de la visita de Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum a la entidad, así como los proyectos de infraestructura eléctrica que desarrollará la Comisión Federal de Electricidad.
