Tijuana.- El gobierno del estado tuvo que cerrar, reiniciar o cancelar alrededor de 60 contratos para obra pública heredados de anteriores administraciones, expuso el secretario de Infraestructura, Desarrollo y Reordenación Territorial Urbano (SIDURT), Arturo Espinoza Jaramillo.
Durante la conferencia mañanera semanal, precisó que la administración estatal recibió 80 contratos en proceso, de los cuales 60 estaban bajo ese tipo de condiciones, además de que presentaban un retraso importante. Indicó que entre 10 y 15 contratos, se requirió de la fianza, estando estas aún vigentes.
Comentó que un ejemplo de una obra en ese estatus, era la de la biblioteca pública Benito Juárez, que recientemente reiniciaron las obras, luego de hacerse ajustes en cómo se había planteado originalmente.
Indicó que el gobierno del estado ha estado ejerciendo para obra pública, los mil 500 millones de pesos del crédito solicitado en el primer semestre de 2021
En el mismo tema, la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, comentó que proyectos que recibió su administración tuvieron que ser modificados, debido a que no tenían pluviales o descarga de agua.
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Ávila indicó que en su gobierno se han invertido tres mil 500 millones de pesos en obra pública, en contraste con los cinco años previos, donde el monto ascendió a dos mil 900.
Puso énfasis en los proyectos de movilidad, remarcando que no se abordarán como un tema político, sino de desarrollo sustentable.
La ejecutiva estatal igual habló sobre las finanzas del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del gobierno y Municipios del estado (Issstecali), calificándolo como el reto financiero más importante de su gobierno.
Afirmó que existe la disposición por parte de los ayuntamientos para cumplir con pagos y rezagos, a través de diferentes convenios.
“Muchos años en que el Issstecali fue la caja chica y ahora es el reto financiero más grande que tiene el estado”, concluyó.
