Persiste el hambre y el abandono institucional para la población migrante porque no puede acceder a los apoyos al carecer de una identificación, señaló la subdirectora de la organización Al Otro Lado, Soraya Vázquez.

“Las carencias han continuado en los albergues, pero agencias internacionales como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR, por sus siglas en inglés) han apoyado. Hay un abandono institucional y es evidente la falta de estrategia o de acción para atender a esta población que es más vulnerable en el contexto de la pandemia”.

En ese sentido detalló que no reciben ninguno de los beneficios que el gobierno federal o estatal puede ofrecer a la población en medio de la contingencia sanitaria.

“Por ejemplo las despensas que andan repartiendo, si eres migrante no te van a dar una despensa porque te piden tu INE para podértela dar, entonces ya ahí hay un tema de exclusión y discriminación que no ayuda en nada.”

Dijo que la necesidad es muy grande porque la gente no tiene para comer y piden ayuda a los grupos de la sociedad civil, porque no pueden cubrir su primera necesidad que es alimentarse.

“Hemos repartido ayuda a través de tarjetas prepagadas. Nosotros en Al Otro Lado dimos varias de esas tarjetas y estamos viendo la posibilidad de conseguir más recursos para poder abordar más población. Son familias y mujeres con dos o tres niños que no tienen un ingreso para darles de comer a sus hijos”.

Otro de los problemas que dijo han observado entre la población migrante es la pérdida de los empleos, lo cual dificulta que los migrantes puedan obtener un ingreso y darle de comer a sus familias.

“Esto no lo está atendiendo nadie y una vez más las organizaciones de la sociedad civil son las que están cargando la situación humanitaria de estos migrantes, porque no hay una respuesta institucional”.

Explicó que han tratado de apoyar a través de pequeños proyectos productivos, ya sea que los migrantes sepan hacer algo o tengan alguna habilidad, para que puedan recuperar su autonomía. No obstante reconoce que no es un camino sencillo y va a tomar su tiempo.

“Vamos a apoyar en lo que se pueda y por lo menos hemos ser tratado de asegurar su vulnerabilidad alimentaria. Si no fuera por estas tarjetas que hemos dado y estas otras ayudas, junto con lo que la gente ha hecho con las despensas, la verdad no sé qué sería de la gente.”

Sobre si existen o no reportes de Covid-19 en los albergues, anotó que supieron del caso de un responsable en un albergue, pero de inmediato se tomaron las medidas para aislarlo y dar seguimiento a las personas albergadas. El reporte es que ya salió del peligro y está recuperándose y sin que hubiera más contagios.

Agregó que en los albergues hubo una buena intervención de las organizaciones y que el gobierno del estado en un principio les dio una charla informativa explicando de qué se trataba y las medidas de seguridad.

“Pero no hicieron nada para que ellos pudieran mantener sus espacios sanitizados y que la gente pudiera estarse lavando las manos. De nuevo fuimos las organizaciones las que hemos dado dotaciones de paquetes muy grandes, compramos productos de limpieza para que limpien los espacios, gel antibacterial, jabón, cubrebocas para que mantuviera en el lugar limpio y evitar los contagios. La información que se pegó en distintas zonas de los albergues para que vieran de manera sencilla por qué es importante lavarse las manos y además no dejaron salir a la gente, eso ayudó a que no hubiera contagios en los albergues”.

Aseguran que no hay apoyo de las autoridades, solo una buena intervención de las organizaciones