Uriel Saucedo
Tijuana.- Durante el presente año han asesinado a ocho periodistas en distintos puntos del país; 57 durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, y poco más de 133 han sido víctimas de homicidio desde el año 2000 por haber ejercido la labor periodística.
Ante esta problemática, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) lanzó la campaña "Con violencia no hay libertad de expresión" con la que se busca crear consciencia sobre cómo la desaparición, asesinato y acoso contra los periodistas merman la libertad de expresión en el país.
El visitador de la CNDH, Edgar Corzo Sosa, en su reciente visita a Tijuana, expresó que el factor de violencia que viven algunos estados del país afectará la labor del periodista ejemplificando que si en un estado el índice de homicidios es alto, será probable que el homicidio alcance también al periodista. Además, resaltó que este tipo de campañas son sólo el instrumento para generar consciencia entre la población, más no la solución definitiva para esta problemática que aqueja a quienes laboran como periodistas.
Por su parte, la presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en Baja California, Melba Adriana Olvera, expresó que el ataque a periodistas es una forma de debilitar al estado de derecho. Aprovechó para pronunciarse en los casos de los periodistas en Mexicali que han sido hostigados o se les ha impedido realizar su trabajo cuestionando la razón del por qué el gobierno no quiere que la población escuche lo que el periodista tiene por decir.
“No hay estado de derecho y no hay democracia sino hay libertad de expresión, y con violencia tampoco hay libertad de expresión”, resaltó la titular de la CEDH al tiempo que reconoció la labor del periodista cuando expone su vida con el fin de tener un México más justo e informado.
Asimismo, destacó que las agresiones más frecuentes que se tienen registradas en contra de los periodistas se encuentran aquellas que han ocurrido durante la cobertura de marchas y protestas sociales, en donde las mismas autoridades y cuerpos de seguridad del estado los han violentado a través de agresiones verbales, amenazas, golpes, robos, destrucción de equipo fotográfico y por detención arbitraria; así como por privación ilegal de la libertad.
Con respecto a esta campaña, se indicó que estará integrada por una serie de “spots” en radio y televisión, pósteres; así como vídeos testimoniales, contenido en formato gif e infográfico y un documental.